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viernes, 30 de septiembre de 2022

Lo que me está pasando con mi papá


Capítulo 1

Hola… eh, no tenía planeado volver a escribir a aquí, pero necesito desahogarme. Lo que estoy viviendo en este momento no me deja dormir, y no puedo contárselo ni a mi mejor amiga. Así de grave es

Esto empezó hace poco menos de dos meses, tenía yo 16 años y estaba a punto de salir del bachillerato.
Me describo, me llamo Maholys, soy venezolana, tez blanca, muy blanca, pelo negro lacio y una cara bonita que me hace aparentar ser mucho menor, podría aparentar 15 o 14 años si no fuera porque soy alta y tengo el cuerpo bien definido, si bien soy delgada tengo las nalgas bastante grandes debido a que hago sentadillas desde los 12 años, mi senos son medianos, más pequeños que grandes, mis pezones son rosaditos y en conjunto hacen a mi parecer mis senos perfectos


Antes de ir a lo importante los pondré en contexto, lo que les voy a contar a continuación me avergüenza mucho así que evitaré dar muchos detalles.

Era un día sábado, mi primo Diego había venido de vacaciones, él se había mudado hace unos años a otra ciudad y tenía tiempo que no lo veía.

El vino a visitarme un día después de su llegada, aunque sus padres viven muy cerca yo ni me había enterado que había venido. El hecho es que me vino a visitar y yo estaba sola en la casa. Nos fuimos a mi habitación a conversar y ponernos al día. Mi primo y yo nos teníamos mucha confianza, de echo cuando era niña me hacía a la idea de que éramos novios y varias veces le hice sexo oral, en ese tiempo yo tenía 9 años y el 14, pero bueno de eso no me arrepiento. Nos pusimos a platicar y una cosa llevo a la otra y nos terminamos besando, minutos después ya estaba desnuda y en cuatro mientras mi primo se daba gusto conmigo. Hasta aquí todo normal, eso no es lo que me avergüenza, mi primo era guapo y hace tiempo que queríamos que esto pasará. Lo que realmente me avergüenza y me cuesta incluso escribirlo, es lo que les contaré a continuación.

Por el ruido del colchón y mis gemidos (soy muy ruidosa cuando tengo sexo) no escuchamos cuando alguien entró en la casa. Era mi mamá, imagínense llegar a casa y escuchar a tu hija de 16 años que creías  inocente gemir cómo una perra al mismo tiempo que escuchas los chirridos del colchón, sonido inconfundible de que se está teniendo sexo. Mi mamá abrió la puerta de mí habitación y me encontró en esa situación tan humillante, desnuda y  en cuatro mientras mi primo entra y sale de mi interior.

Obviamente mamá hizo un escándalo, corrió de la casa a mi primo mientras yo me escondía debajo de la sábana llorando como una niña que sabe que ha hecho algo muy pero muy malo y acaba de ser descubierta por su madre. Mamá me gritó, me regañò, incluso me abofeteó, yo solo seguía llorando queriendo que me tragara la tierra.

–no vas a salir de esta casa hasta que tengas 18 – fue lo último que dijo mamá antes de salir de mi habitación azotando la puerta

Yo no podía parar de llorar, me quería morir, para empeorarlo todo oigo cómo llegan personas a la casa, por las voces supe que eran mi papá y mis dos hermanos, mi mamá histérica no tardó ni un segundo en empezar a contarles lo que había ocurrido. Que vergüenza, ¿Por qué tenía que contarselos a ellos? ¿Ahora como voy a mirar a los ojos a mi papá? Para el era su niña consentida, igual que mis hermanos.

Ese día no salí de mi habitación, la vergüenza y el miedo al repudio de mi familia me hizo encerrarme. Fue hasta el día siguiente como a las 4pm que salí de mi habitación, no podía aguantar más el hambre, aparte me la había pasado llorando y me sentía muy débil. Esperé a que no hubiera nadie en la casa y me dirigí a la cocina. Para mí mal no estaba sola, me cruzé con mi hermano mayor

-hola Luis – lo saludo, el solo me ignoró y siguió su camino. No puedo expresar lo que me dolió eso, me fui corriendo a mí habitación a llorar nuevamente.

Pasaron dos días más, no salía de mi habitación hasta que el hambre me obligara, y lo hacía solo cuando creía que no hubiera nadie en la casa.

Fue hasta el cuarto día que alguien me dirigió la palabra, fue mi papá, entró en mi habitación y me dijo.

-bueno maholys que es lo que pasa contigo, tengo cinco días que no te veo ni para cenar, mira lo flaca que estás ¿Hace cuánto que no comes?

-creo que comí ayer, no se – digo con la voz ronca de tanto llorar

-no puedes seguir así, tienes que superar lo que pasó, no puedes echarte a morir por eso

-¿Y que más da? A nadie le va a importar si me muero, aquí todo el mundo me odia – digo molesta

-No digas eso, pero tienes que entender su molestia, no fue una gracia lo que hiciste

-¿Y tú crees que no lo sé? – digo nuevamente al borde de las lágrimas mientras me tiembla el labio inferior – Me gustaría volver el tiempo atrás pero no puedo, no puedo  – las lágrimas ya recorren mis mejillas – ustedes están molestos conmigo, pero no piensan en lo que estoy sufriendo, no sabes lo que me duele sentir su desprecio, me odian papi, me odian – mi llanto ya se vuelve incontrolable y me tapó el rostro con la mano, no me gusta que me vean llorar. Creo que papá se conmovió al ver mi fragilidad porque inmediatamente me abrazó y empezó a consolarme

-Ya mi amor, no llores, están molestos pero ya se les pasará, tienes que darles tiempo

-¿Mas tiempo? Ya pasaron 5 días, mi mamá sigue sin hablarme

-tienes que entenderla, eras la niña de la casa y después de lo que pasó… está decepcionada

-¿Y tú papi? ¿Estás decepcionado de mi? – le pregunto mirándolo a los ojos esperando que su respuesta no me destroce el alma

-no voy a decir que no me molestó, pero me duele ver a mi niña sufrir de esa manera, eres mi hija y te voy a querer pase lo que pase

Inmediatamente lo abracé, sus palabras me devolvieron la ganas de seguir, no les voy a mentir, por un momento pensé en quitarme la vida, sonará exagerado pero tienen que entenderme, pasé de ser la consentida de la casa a la más odiada, de solo recordar la mirada llena de odio en el rostro de mi madre me dan ganas de llorar

-te voy a traer la comida, pero prométeme que vas a cenar con nosotros en la mesa está noche.

Se lo prometí, pero no lo cumplí, no tengo valor para ver a mi mamá a los ojos.

Pasaron dos días más igual, yo salía de mi habitación solo para ir al baño, siempre evitando cruzarme con mi mamá, poco a poco mis hermanos empezaron a hablarme, fríamente y en pocas ocasiones, pero ya era un avance.

Una semana después del incidente mi madre me vuelve a hablar

-Maholys levántate, que hoy es la ceremonia de graduación

-me vas a dejar ir?

-solo a la ceremonia, cuando termine regresaremos inmediatamente a casa – me dijo secamente

-no me vas a dejar ir a la caravana? – le pregunto sabiendo su respuesta

-no, no tienes nada que celebrar

Eso fue un golpe para mí, no saben lo que había esperado ese día para celebrar con mis compañeras que ahora éramos bachilleres

Tal cuál pasó como dijo mí mamá,  en cuanto terminó la ceremonia volvimos a casa, apenas me miré en el espejo para comprobar que era cierto lo que me habían dicho mis compañeras, incluso con todo el maquillaje se veían mis ojeras, se nota aleguas que pasé toda la semana llorando

Pasaron otros dos días más, mi rutina seguía igual, solo que ahora comía un poco más, no me gustaba lo flaca que me estaba poniendo. Al día siguiente fue mi cumpleaños 17, salí esperanzada de que por lo menos por ser mi cumpleaños me demuestren un poco de cariño, pero solo recibí unas frías felicitaciones de mi mamá y de mis hermanos, el único que me felicitó bien fue mi papá que me despertó con un beso y un abrazo además del desayuno a la cama.

Algunos familiares y amigos vinieron a felicitarme, al principio me alegré, estaba tan necesitada de afecto que valoré cada abrazo que recibí, la visita se volvió molesta cuando empezaron las preguntas “¿Por qué tienes los ojos hinchados? ¿Por qué estás tan delgada? ¿Cómo que no vas a celebrar tu cumpleaños? ¿Castigada por qué?”

Era molesto el bombardeo de preguntas y no poder responder ningunas, me alegré cuando se fueron, pero luego me puse triste al notar la frialdad de mí mamá hacía mí, volví a mi habitación y otra vez a llorar hasta quedarme dormida

Bien, creo que ya los puse en contexto, perdón si se les hizo largo pero tenían que saber en la fragilidad emocional en la que me encontraba, espero que no me juzguen por lo que contaré a continuación

Paso una semana después de mi cumplir 17 años, en todo ese tiempo que estube encerrada a aparte de llorar me distraje escribiendo y publicando algunas de mis experiencias sexuales en esta página, mi intención era que algún hombre se interesa en mí y me dejara vivir con el, estaba dispuesta a hacer lo que sea con tal de que alguien me resibiera en su casa, ya no podía vivir más aquí, me dolía sentir el rechazo de mí familia, me decepcioné al ver que nadie se ofreció a quedarse conmigo, pensé que está página sólo las leían hombres solteros, y digo… soy bonita, hubiera hecho lo que ustedes me pudieran a cambio de que me acogieran en su casa, pero bueno, eso me  bajó más el autoestima, así que no volví a escribir más y me puse a leer libros. Uy perdón, me desvíe del tema.

Paso una noche, estaba dormida cuando me despertó la voz de papá llamando a la puerta

-Maholys, estás dormida? ¿Puedo entrar?

Tapé mi desnudez con la sábanas y le dije que entrará. Al entrar papá encendió la luz encandilando me los ojos

-¿Qué pasa papi? – digo tapándome los ojos encandilados

-perdon por despertarte hija pero nececito que me prestes tu colchoneta

-mi colchoneta ¿Para qué?

Resulta que papá se peleó con mi mamá por cosas de dinero, creo que mi mamá le reclamó que el se gasta todo en alcohol o que se yo. El hecho es que mi mamá está molesta con el y no lo deja dormir con ella desde ayer.

-ayer dormí en la silla de extensión, pero me destrozó la espalda – decía mi papá sobándose la espalda con gesto de dolor

-pero papi, esa colchoneta es de cuando yo era niña, no vas a caber ahí no de milagro – papá hizo un gesto de decepción al caer en cuenta de lo que dije – si quieres duerme aquí conmigo

–no, no quiero ser molestia

-tu nunca vas a ser molestia para mí , aparte es mejor que dormir en esa silla

-no, no creo que a tu mamá le haga gracia

-no veo por qué se va a molestar, no es que vas a dormir con otra tipa, vas a dormir conmigo

-no, ya dormiré en la silla de extensión

No pude evitar sentir sus palabras como un rechazo, ahora pienso que fue mentira cuando dijo que me perdonó, seguro fue por lastima y aún sigue molesto, debe sentir mucho asco por mi que prefiere dormir en una silla antes de tenerme cerca. Al pensar en todo eso, empiezo  a llorar

-¿Ahora que te pasa? – pregunta papá

-pasa que aún sigues molesto conmigo, prefieres dormir en esa silla antes que tenerme a tu lado, seguro te doy asco – me tapo con las sábanas para que no me vea llorar

Siento como se sienta a mi lado en la cama y me empieza a frotar la espalda

-no es eso mi amor, cómo me vas a dar asco sí tú eres lo que yo más quiero en este mundo… es que no quiero que tú mamá se ponga celosa

-¿Qué se va a poner celosa? No digas tonterías papá, si soy tu hija por Dios

-Tienes razón amor, pero no quiero molestarte, sabes que ronco mucho

-papa si no quieres dormir conmigo no lo hagas, pero no me mientas como si fuera una niña

Papa se levanta de la cama y se dirige hacía la puerta, pensé que se iría pero sólo apagó la luz y regreso. Se sienta al otro extremo y escucho como se quita los zapatos y el cinturón.

-no tienes que dormir conmigo por lastima – le digo intentando verlo en la oscuridad pero no logro ver nada más que la silueta de mi papá quitándose la camisa

-no te tengo lastima, bueno si te tengo… vas a tener que calarte mis ronquidos

Su mal intento de broma me hizo sentir una tonta, obviamente no está enojado conmigo, me alegro cuando se acuesta a mi lado y le doy un beso en el cachete. No sé Por qué pero estoy emocionada por dormir con mi papá, tal vez porque de niña me gustaba dormirme acurrucada con el.

Pasaron cómo cinco minutos de silencio, el en un extremo de la cama y yo por el otro, aunque quería abrazarlo todo el tiempo, respeté su espacio personal.

-papi, crees que mi mamá me perdone?

-estoy seguro que si

-¿crees que hubiera cambiado en algo que en vez de mi primo lo hubiera hecho con otro hombre?

-Ah… maholys no quiero hablar de eso

-por favor papi, quiero saber, no entiendo por qué se molestó tanto conmigo, sí ya ha encontrado a mis hermanos haciendo lo mismo y no se molestó tanto

-sabes que no es lo mismo, y sobre tu pregunta, me hubiera molestado exactamente igual si hubieras tenido relaciones con otro hombre en vez de tu primo

-¿Pero por qué papi? ¿Es porque soy niña? ¿Por qué yo no puedo hacerlo y mis hermanos si?

Papa deja escapar un largo suspiro y luego me dice

-Maholys, se que estás creciendo y es normal que quieras experimentar pero… perdona el lenguaje pero no es grato saber que a tú hija ya se la están cojiendo

No pude evitar reírme en su cara, papá nunca me había hablado así

-no es gracioso, aparte pienso que aún estás muy joven para hacer esas cosas – dice papá y yo lo interrumpo

-acabo de cumplir 17 años, además tú te acostabas con mi mamá cuando ella tenía 15 años

Papa se quedó en silencio, yo tampoco dije más, no era mi intención empezar una discusión, me conformaba con tenerlo cerca, aunque quería que me abrazara, pero no creo que lo fuera hacer. Pasaron unos minutos hasta que rompí el silencio

-¿Papi? – digo con voz baja para saber si seguía despierto

-dime

-¿Enserio ya no estás molesto conmigo? – le pregunto

-ya te dije que noooo – me dice ya cansado de repetirmelo tanto

-entonces… ¿Me puedes abrazar? La he pasado muy mal éstos días y necesito que alguien me quiera

-Claro, acércate a mi

Me acerco hasta pegar nuestros cuerpos dándole la espalda para que me abrace de cucharita. Es cuando mi papá rosa su mano con mi pecho que me acuerdo que estoy desnuda de la cintura para arriba, tal vez por instinto papá me lo aprieta, me da dos breves apretones e inmediatamente quita la mano

-perdon, no sabía que estabas desnuda – me dice papá

-lo siento papi, se me había olvidado, pero no estoy desnuda, si tengo pantys – le digo apenada

-tranquila no pasa nada – me dice papá mientras empieza a alejarse

-es que me da calor dormir con ropa – me excuso

-te entiendo

-pero no te alejes por favor, abrázame por aquí – le digo tomando su mano poniendola sobre mi ombligo

Papá me abraza pero ya no pega su cuerpo con el mío, yo quiero que me abrace bien y me echo hacia atrás pero papá se aleja al sentir mi cercanía

-¿Te incomoda  abrazarme así? – le pregunto – si quieres puedo ponerme una camisa

-eh… no, estás en tú cuarto, si te gusta dormir desnuda no quiero que cambies por mí

-pues entonces abrázame bien, quiero sentir tu cuerpo – lo dije sin intención de doble sentido, solo quería quee acercara más, por un momento lo hizo, pegó su cuerpo al mío, pero no tardó mucho en volver a separarse de mí.

Estba frustrada, quería que él me apapache pero no lo hacía, estaba cómo cohibido, tal vez no quería pegarse mucho a mí porque estaba medio desnuda, yo no le daba importancia a eso, digo, me ha visto Miles de veces desnuda cuando era niña, la única diferencia es que me crecieron los senos y el trasero pero sigo siendo la misma niña.

-si no quieres abrazarme así podemos cambiar

-¿A qué te refieres?

-que tú te pongas boca arriba y yo te abrazo a ti – le sugiero

-si, creo que será mejor – me dice mientras me deja de abrazar y se pone boca arriba como le indique. No tardo ni un segundo en acurrucarme con el, pongo mi cabeza en su pecho como si fuera una almohada y le doy un beso cerca de su pezón, paso una pierna sobre las suyas envolviendo su cuerpo con el mío. Aclaro que papá aún tenía el pantalón puesto, por mi parte yo estaba solo en pantys, pero como era mi papá no le dí importancia

-¿Te puedes quitar el pantalón? – le pregunto

-¿Para que?

–es que me molesta la tela, me raspa la pierna

-pues entonces quita tú piernas de ahí

-pero yo quiero dormir contigo así – le digo con voz de niña mimada

-no me quiero levantar para quitarmelo

-no es necesario, yo te lo quito – le digo y me incorporo, me descubro de las sábanas y bajo hasta quedar en buena posición para desabrochar el botón de su pantalón

-Maholys que haces? – dice papá mientras exitosamente logro desabrochar el pantalón en la oscuridad, soy una experta desabrochado pantalón y bajando bragetas. No le respondo y le bajo el pantalón hasta quitárselos y lanzarlos al suelo.

-Me vuelvo a cubrir con la sábana y retomo la posición en la que estábamos, yo acurrucada en su pecho y mi pierna sobre la suya

-!vez! ¿No estás más cómodo?

Papá no respondió, solo me abrazó dejando su mano en mi espalda desnuda

-papi, estás muy peludo, pero me gusta, tu pelitos me hacen cosquillas

-y tu todo lo contrario, me gusta tocar tu piel, la tienes muy suavecita – me dice mientras me empieza a acariciar la espalda, estoy tan feliz que dejo escapar una risita tonta

-gracias papito, te quiero mucho – le digo y le dot dos besitos en el pecho

-¿Gracias por qué?

-por todo, por apoyarme en mi sufrimiento, desde que mamá me encontró haciendo eso me he sentido muy sucia, pero estando contigo así me hace sentir una niña de nuevo, a tu lado me siento segura, es la primera noche que no lloro

Papà no me dice nada solo me abraza más fuerte y me da un beso en la cabeza.

El pegarme más a él puedo sentir como descansan mis senos en su pecho, me dan cosquillas cuando sus pelos de pecho rozan mi pezoncito. Me entra la risa al pensar que si nos viera mi mamá ahora si que se pondría celosa

-¿De que te ries? – Me pregunta mi papá que  me sigue acariciando rico la espalda

-de nada… oye papi … ¿Te puedo hacer una pregunta muy personal?

-dime

-eh… yo… ¿Yo soy la segunda mujer que

abrazas desnuda en tu vida?

-supongo que si, aunque no te veo como mujer, para mí sigues siendo mi niña – me vuelve a besar la cabeza y me abraza más fuerte

-enserio? ¿Nunca le has puesto los cuernos a mi mamá?

-claro que no

-no te ofendas pero me cuesta creerlo, tú eres muy guapo y tienes buen cuerpo, y mamá se ha descuidado físicamente en estos años

-gracias por lo de guapo pero creo que me estás viendo con ojos de hija, no creo que sea tan guapo

-pues si lo eres, ojalá yo hubiera heredado tus ojos verdes

-Tus ojos son hermosos – me dice

Me gusta tanto como me está tratando que le doy un beso en el cachete, aunque por la oscuridad casi lo beso en la boca

-oye papi, estar así contigo me recuerda la historia de una amiga, ¿Quieres que te la cuente?

-claro, espero que sea muy aburrida y me de sueño.

-bueno, te lo voy a contar y espero que no se lo cuentes a nadie. ¿Sabes mi amiga Génesis? Su mamá se fue a vivir con un tipo y la dejó sola con su papá hace dos años, ella tenía 15 años. Su papá estaba muy triste, no estaba acostumbrado a dormir solo. ¿Papi me estás escuchando?

-Si amor – dice con la voz adormilada

-bueno, a ella le dio tanta lastima verlo así de triste, que le dijo que ella hiba a dormir con él hasta que se consiga una novia. Bueno ella empezó a dormir con su papá, normal, así como estamos nosotros, pero varias veces ella se despertaba a media noche, sentía que su papá le metía mano dormido, ella pensaba que la estaba confundiendo con su mamá y lo ignoró, pasó así hasta que una noche ella se despertó con las piernas abiertas y su papá estaba a punto de hacerle el amor, ella se asustó pero lo dejo hacer, pensó que su papá lo necesitaba y a ella no le costaba nada dejarlo, ella no era virgen tenía novio. Bueno el hecho es que dejo que su papá se desahogara con ella, ahora ella tiene 17 años igual que yo, y aunque tiene novio sigue durmiendo con su papá.

-¿Estás hablando enserio? – me pregunta papá

-claro, ella misma nme lo contó

-¿Y por qué me cuentas eso a mí? – creo que lo dice molesto

-no sé, solo me acordé, probablemente ellos están abrazadito así como estamos nosotros

-pues no nos parecemos en nada con ellos – ahora síi me lo dice molesto

-lo sé, lo sé, no lo dije por eso, sé que tú nunca me tocarías – papá me deja de abrazar y se aleja un poco de mi

-papi no me  dejes de abrazar por favor – le suplico asustada de haber dicho algo que le haya molestado

-ya es tarde Maholys, vamos dormir que tengo que trabajar mañana – dice mientras me da la espalda y se aleja de mi

Yo no le insisto más y me acomodo dándole la espalda, siento que lo arruiné todo, hice enojar a mi papá, la única persona que ha demostrado que aún me quiere, sin poder controlar empiezo a llorar una vez más. Pensarán que soy una llorona que llora por cualquier cosa pero no es así, de echo rara vez lloro, pero es que estaba en el momento más vulnerable de mi vida, sentía que había perdido para siempre a mi familia, no puedo mirar a los ojos a mi mamá porque me recuerda que me vió desnuda cogiendo y en cuatro con mi primo detrás.

Intento que papá no me oiga llorar pero no lo logro

-Por favor Maholys deja de llorar, no es para tanto – dice papá con voz calma – te va hacer daño llorar tanto

-perdoname papi, te juro que no te comparaba con el papá de mi amiga – le digo llorando aún dándole la espalda

-lo sé amor, lo sé, yo fui el que exageré, pero por favor deja de llorar

-no quiero perderte papi, no a ti, si te enojas conmigo tu también… prefiero morir

Papá me abraza otra vez, su antebrazo rosa mi seno pero no me suelta

-no vuelvas a decir eso nunca, te prometo que voy a hablar con tu mamá y tus hermanos para que te vuelvan a tratar como antes, no me gusta como está afectando sus actitudes

-me afecta mucho papi, mucho – digo llorando

Papá me abraza y me consuela hasta quedarme dormida.

No sé cuánto tiempo me dormí pero me desperté al sentir mi pezón apretados por los dedos de papá, me apretaba los pechos y me acariciaba mi abdomen bajo, mi respiración se empezó a acelerar, siento como empiezo a mojar mi ropa interior, me estaba excitando y es que tenía mucho tiempo que no me tocaban de esa forma, tenía tres meses sin tener sexo, lo de mi primo no contó porque mi mamá nos interrumpió apenas empezó a metermela, y es que desde los 13 años no había tenido tanto tiempo sin tener sexo, nesecitaba que me la metieran urgentemente, inconscientemente abro un poco mis piernas cuando siento la mano de papá queriendo tocar mi coñito mojado. Uff que delicia sentir que alguien me toca en mi lugar favorito otra vez. Inmediatamente me entra la culpa, es mi papá, probablemente esté medio dormido pensando que yo soy mi mamá, me estoy aprovechando de él. Me pongo boca abajo para evitar que me siga tocando, mi sorpresa fue sentir como papá sacó rápidamente la mano de mi ropa interior en cuanto me moví, no estaba sonámbulo, estaba despierto, ¿Sabía que me estaba tocando a mí o me confundió con mamá?. Me hice la dormida para que no se sienta culpable.

Intento dormirme otra vez, pero siento la mano de mi papá acariciandome las nalgas mientras oigo su respiración acelerada mientras siento leves movimiento del colchón.

Creo que se estaba masturbando, es normal, lo que no es normal es que me esté tocando el culo, soy su hija, una mezcla de emociones pasan por mi cabeza, por una parte siento que tengo que detenerlo y por la otra me gusta que me toque.

Hago como que si me estoy despertando y me volteo

-estas despierto? – digo en voz baja.

El no me responde pero puedo puedo oír su respiración acelerada

-tuviste una pesadilla? – le digo apoyando mi barbilla en su pecho intentando verlo en la oscuridad

-ehh… si – me dice duditativo

-ay pobrecito mi papito – le digo abrazandolo y acurrucandome en su pecho. Sentía la incomodidad de papá, probablemente se sienta culpable aunque yo no estoy molesta, me parece normal que nesecite desahogarse. No sé si lo hice por curiosidad o por excitación pero volví a pasar mi pierna por encima de las suyas rozando su pene

-uy, perdón papi – le digo retirando mi pierna pero sin dejar de abrazarlo

Mi papá no dice nada, creo que está avergonzado de que me dí cuenta de su erección

-perdon, creo que fue mi culpa – le digo aún recostada en su pecho

-¿De que hablas?

-estas así por lo que te conté ¿Verdad? ¿Por eso no puedes dormir?

Papa se vuelve a quedar callado, no le gusta que me haya dado cuenta de su erección

-¿Necesitas tocarte? Si quieres puedo dejarte solo un rato

-no, ya se me pasará

Yo no digo más nada, empiezo a acariciarle el estómago haciendo un círculo con mis dedos alrededor de su hombligo, poco a poco voy bajando hasta rosar el elástico de su boxer, siento como late fuerte su corazón

-esto te ayuda papi?

-¿Qué?

-que si te relaja lo que estoy haciendo, ¿ya se te bajo?

-ehh… si

Yo vuelvo a pasar mi pierna por encima de sus piernas y vuelvo a rozar su erección

-mentiroso, lo tienes duro ¿Por qué me mientes?

-perdon, me da vergüenza

-no pasa nada papi, yo sé que eso en normal, por eso te digo que si quieres te dejo solo para que te toques

-no, tranquila

Nos quedamos en silencio, se que yo podía ayudar a mi papá, y no me molestaría, ya se lo he hecho a otros hombres que no quiero pero me da pena ofrecerle mi ayuda, se que no es lo correcto, pero me siento en la necesidad de ofrecerme por lo menos

-oye papi… Eh… si tú quieres yo… eh, si tú… olvidado

-dimelo ¿Qué pasa?

-digo que yo podría sí tú quieres… eh… no, me da pena decírtelo

-anda dime

-es que no sé sí te vas a molestar

-si no es nada malo no me voy a molestar

-no es malo pero, prométeme que no te vas a molestar, sí no quieres solo di que no y ya, pero no te molestes conmigo¿Me lo prometes?

-te lo prometo

-si tu quieres yo… si tú…eh… yo te, puedo ayudar

-ayudar de que?

-eh, papi… yo, si no quieres sólo dime qué no… yo puedo… yo puedo, hacerlo por ti sí tú e

-hacer que – me pregunta

-ya sabes – digo sin tener valor para pronunciar la frase

-no maholys, no te entiendo

-si quieres yo puedo… tocarte – digo muy bajito

-¿Cómo que tocar?

-que te puedo masturbar, no me molestaría

Papa me quita de encima y levanta el torso de la cama

-Maholys estás loca? – me dice molesto

Yo ya estaba más que asustada, se ha vuelto a enojar conmigo y no puedo dejar que eso pase. Así que me gindo de su cuello y lo abrazo

-perdoname papi, perdóname, me dijiste que no te ibas a molestar papi perdóname – no fue a propósito pero quedé sentada en su erección mientras mis senos pegaban con su pecho mientras lo abrazaba para que no se parara de la cama – olvídalo papi, olvídalo si quieres – le digo empujándolo para que se vuelva a acostar, cuando logro acostarlo me quito de su erección y me vuelvo a acurrucar en su pecho

-Maholys yo…

-no digas nada, por favor

Pasamos 2 minutos sin decir nada, yo estaba aferrada a él por sí se le ocurría irse

-ya se te bajó? – le pregunto

-si

-no me mientas

-no lo hago

Sin pensarlo bajo mi mano y se lo aprieto por encima del bóxer, papá dio un brinco

-¿Qué haces? – me pregunta mientras me quita la mano de su pene

-¿Por qué me mientes? Todavía lo tienes parado

-¿Y que más te da? – me dice molesto

-papi, te dije que te puedo ayudar

-¿por qué no? – le digo y antes que pueda responder se lo vuelvo a tocar, está vez más suave

-porque soy tu papá – le empiezo a acariciar la punta de su pene por encima del bóxer

-porque eres mi papá es que quiero ayudarte, no voy a hacer nada malo, solo te voy a tocar un poquito, de arriba abajo ¿Vez?

Empiezo a subir y a bajar mi mano mientras le aprieto el pene

-maholys para – me dice pero se que quiere que continúe, deslizo mis dedos por debajo de su elástico y tocó el pene de papá por primera vez, intento masturbarlo pero le bóxer me incomoda, intento bajarselo pero su peso me lo impide

-¿Te lo puedes bajar? – le digo pero el no hace nada –por favor – sorprendentemente papá no se lo baja pero alza su culo para que se lo baje.

-lo tienes muy grande – digo sorprendida al envolverlo entre mis dedos por primera vez, casi no me cabe en la mano, aún así empiezo el sube y baja

-vas a ver que cuando termines dormirás cómo un bebé – le digo aún recostada en su pecho mientras siento los latidos de su corazón en mi oído, y siento la palpitacion en mi mano

Mientras mi mano sube y baja, le acaricio la punta con mi pulgar, está llena de líquido preseminal, de repente siento unas ganas locas por probar su semen, de meterme su pene en la boca y saborearlo todo, pero me reprimo, no voy a cruzar esa raya, no quiero que piense que soy una puta.

-ahhh – el gemido de papá me alborota, siento que estoy empapada, estoy segura que con toda esa lubricación su pene resbalaria en mi interior sin lastimarme, es el más grande que he tocado, tiene mucho que ver que todos con lo que me acostado son adolescentes, pero mi papá, este si es un hombre de verdad.

La respiración de papá se acelera, quiero besarle la boca y que sus gemidos se pierdan en mis labios, pero tampoco puedo cruzar esa raya. Me limito a besar su pecho, encuentro su pezón y empiezo a hacer circulitos con mi lengua

-¿Te gusta papi?

-ahhh – tomo su gemido como aprobación y lo sigo haciendo

Sus respiración me indica que está por venirse y acelero el ritmo, pero de inmediato me detengo al pensar que menva a manchar las sábanas.

Me detengo y nos quito la cobija de encima, me pongo de rodillas a la altura de su pene

-¿Qué pasa? – dice papá contrariado por dejar de tocarlo, es la primera vez que habla desde que empecé a tocarlo

-me voy a acomodar para que acabes en mi mano, no quiero que ensucies la sábana – le digo retomando la paja

-no creo que te valle a caber en la mano, tengo tiempo que no me acuesto con tu mamá, debo tener mucha leche

Al escuchar eso sólo pensé en una solución, aparte es como quería que termine, tomo valor y me lo meto en la boca, me sorprende el esfuerzo que tengo que hacer para que me entre sin lastimarlo con mis dientes, pero sentir ese líquido delicioso de papá lo vale, se me hizo agua la boca, literalmente.

Papá empezó a gemir al sentir la calidez y humedad de mi boca, solo una succión bastó para que empezará a lanzar chorros directos a mi garganta, trate como pude, me hubiera gustado poder saborearla toda pero fue tanta la leche que se me derramaban por las comisuras de mis labios, recogí lo que pude, con la luz apagada no podía ver las gotas de leche que se me escaparon así que pasé mi lengua por todo su bello púbico, papá estaba muy peludo, luego limpie su pene hasta dejarlo limpio y me volví a acurrucar en su pecho, tenía miedo de su reacción, ¿Qué estarás pensando de mí?

-¿Te gustó? – le pregunto pero no me responde -¿Me puedes abrazar? Así sabré que no estás molesto conmigo – papá me abrazó y me dio un beso en la cabeza

Despues de unos segundos de silencio papá empieza a hablar

-maholys, no debí dejar que esto pasará, yo…

-solo lo hice para ayudarte porque te quiero – lo interrumpo – espero que no pienses que soy una… una zorra

-no pienso eso, pero esto no debe volver a pasar

-lo sé, no quiero que nada cambie entre nosotros papi, espero que me sigas viendo cómo tú hija, no cómo mujer

-eso no pasará, olvidemos lo que pasó y ya

-antes de eso, ¿Te puedo pedir un favor?

-¿Qué?

-me puedes tocar tu a mi, no será lo mismo si lo hago yo, sí lo haces tú acabaré rápido, tengo tiempo que no me toco

Me baje de su pecho y me puse boca arriba quitándome mi panty, abrí mis piernas y dirigí la mano de mi papá a mi coñito

-estoy muy mojada, si quieres puedes meterme los dedos, has lo que quieras

Mi papá empezó a frotarme los labios vaginales con los dedos, apenas empezó empecé a gemir

-acelera papi, por favor

Papa aceleró el ritmo, di un brinquito cuando atrapó mi pezón en su boca, mi papá me estaba chupando la teta cómo un bebé, aunque sentía muy rico sentí que eso era demasiado

-papi, me gusta que me chupes ahí, pero no lo hagas, después te vas a enviciar y esto solo va a pasar una vez

-pues entonces déjame probarte – me dijo y empezó a bajar recorriendo mi cuerpo con su lengua hasta llegar a la zona del pubis

-no lo hagas, no cruces la raya – le digo

-solo quiero probar como sabe mi niña

Me abrió bien las piernas e inmediatamente me lamió desde el ano hasta mi coñito, sentí muy rico, papá empezó a lamerme toda la vagina, me tapé la cara con la sábana para ahogar mis gemidos cuando empezó a jugar con mi clítoris, inconscientemente una mano atrapó su cabeza empujándolo más hacía mí

-meteme la lengua papi – le digo y me ha e caso, mi papá empieza a meter y sacar su lengua de mi vagina

Despues de unos minutos papá se cansó y empezó a meterme los dedos, empezó con uno y ya me estaba metiendo tres, ya estaba punto de tener un orgasmo así que lo bañé del brazo hacia mi empecé a besarlo, el dejó de tocarme abajo y su mano empezó a apretarme los senos

-no seas malo papito, estoy a punto de venirme, besame pero sigue tocandome abajo

Me volvió a meter los dedos al mismo tiempo que metía su lengua en mi boca, no le dio asco que hace unos minutos tenía mi boca llena de su rico semen.

Yo movía mis caderas al ritmo de sus dedos y en unos segundos llegué a un orgasmo impresionante, no hay nada que me guste más que me besen al mismo tiempo que llego al éxtasis.

Volvi a tomar conciencia y estube a mi papá que me seguía besando apasionadamente.

-ya papi, para – le digo quitándome lo de encima

-besas muy rico hija

-gracias papi – le digo acurrucandome de nuevo en su pecho

-sabes deliciosa amor, eres perfecta

-gracias papi, tu también sabes rico pero deja de hablar así, soy tu hija y espero que me sigas viendo así

El no me respondió, nos quedamos dormidos así

Bueno lo voy a dejar hasta aquí por ahora, pero esto solo es el comienzo, lo que acabo de contar no es ni una mínima parte de lo que está pasando con mí papá, me siento muy culpable porque ya me reconcilié con mi mamá, pero mí papá no para de hacerme el amor, se está enamorando de mí y yo no sé que hacer, necesito consejos.

Bueno ahora me estoy concentrando en hacer ejercicios, una amiga me convenció de inscribirme con ella en una escuela de modelaje, así que si quieren saber que pasó después escríbanme, y por favor si alguien tiene algún consejo que darme o ha pasado por algo similar díganme qué debo hacer, por una parte quiero detenerlo pero me gusta como me coge, aparte me está consintiendo con regalos

Capitulo 2

Me desperté a las cinco de la mañana, estaba desnuda abrazada con mi papá, “que locura por Dios” ¿Por qué hice eso?. Mi mente se llenó de angustia, anoche no pensé con claridad, masturbé a mi papá y me tragué su leche sin que él me lo pidiera. Me levanté con cuidado y para no encender la luz me puse la camisa holgada que le robé a mi hermano, era lo suficientemente larga para tapar la mitad de mi muslo. Salí de mi habitación, no quería estar cuando despierte mi papá, ahora lo tengo que evitar hasta que se enfríe todo. “Que mierda, ahora sí que estoy bien sola, mi papá era el único que me trataba en esta casa y ahora no puedo verlo a la cara” quiero llamar a mi hermano Miguel, justamente tubo que irse a trabajar a otra ciudad cuando más lo necesito, el sí me hubiera entendido, no cómo estos hipócritas que les duele que yo tenga sexo, cómo sí ellos no lo hicieran. Siento unas ganas de llorar, pero no lo puedo hacer en medio de la sala, decido salir al patio, aún no salía el sol, sentí el frío de la madrugada en mi en mi entrepierna, no me puse ropa interior, bueno estoy sola aquí que importa, me senté sola ahí hasta que amaneció, cuando la luz me hizo ver que sentada está camisa no me tapaba nada, entré de nuevo en la casa y ya estaba mi mamá despierta, estaba cocinando y se sorprendió cuando me vió llegar del patio.

-y tu de donde bienes? – me pregunta molesta cómo suponiendo que vengo de la calle

-estaba sentada en el patio – digo con la voz tupida intentando que note que estaba llorando, tal vez si le doy lastima baje la guardia conmigo. Pero no

-¿Y que hacías allá sóla?

-no podía dormir, papá ronca mucho

-durmio en tú ccuarto? – pregunta mi mamá sorprendida

-si, me dijo que tú lo corriste de tu cuarto, se durmió en mi colchoneta en el piso, yo le pedí que durmiera en mi cama pero no quiso, supongo que igual que ustedes él no soporta mi presencia. – lo dije esperando que me dijera que no sea tonta, que ella no me odia, pero solo siguió cocinando

Entre en mi habitación y papá se estaba vistiendo, se acababa de bañar.

-¿Dónde estabas? – me pregunta mientras se abotona la camisa

-estaba afuera, le dije a mi mamá que dormiste aquí en el piso

-esta bien, voy a hablar con ella de lo de anoche

-que???? – digo asustada

-de lo que hablamos, no puede seguirte despreciando y evitando como si fueras una criminal, tiene que entender que por su actitud no has dejado de llorar y apenas comes

-¿En serio? Gracias papi – lo abrazo, quería evitar lo más posible a mi papá, pero no pude evitar abrazarlo

-me voy que estoy justo de tiempo – se fue sin darme un beso, supongo que eso es bueno, está cumpliendo la promesa que todo seguiría igual entre el y yo, tampoco dijo nada de lo que hicimos anoche, el ya se hizo a la idea de que nunca pasó y era lo que yo quería, ahora tengo que hacerme a la idea yo, pero me cuesta, hace unas horas hice que mi papá se viniera en mi boca, no sé si es mental pero creo que puedo sentir el sabor de su leche en mi paladar.

Me acuesto en la cama y espero que cuando despierte todo sea como antes.

Habre dormido un par de horas cuando me despierta la voz de mi mamá.

-¿Qué pasó? – pregunto adormilada

Mi mamá se sentó al borde de la cama y me dijo

-maholys, hablé con tú papá y me dijo cómo te sientes… y quiero pedirte perdón, estaba tan molesta que no pensé que te fuera a afectar tanto, ¿Enserio pensaste en quitarte la vida? – me dice mi mamá preocupada. Si bien ese pensamiento pasó por mi mente nunca lo hubiera hecho, pero me quería hacer la víctima, quiero que mi mamá sufra lo que yo sufrí, que le dé remordimiento, que piense que su desprecio hacía mí casi hace que me mate.

Así lo hice, me hice la víctima y empecé a llorar, le conté lo que había sufrido. Mamá empezó a llorar y me prometió que todo iba a ser como antes.

Senti un alivio después de eso, mi vida se estaba acomodando y todo gracias a mi papá.

Esperé hasta la tarde a qué mi papá llegara de trabajar, en cuanto entró por la puerta corrí hacia él y me ginde en su cuello abrazandolo y besándolo en el cachete

-gracias, gracias, gracias, te amo

-Espero que ya dejes la lloradera – me dijo con una sonrisa – ¿Y tú mamá?

-no está, pero yo te hice la comida, !ven¡ – lo tomo de la mano dirigendolo a la mesa – para demostrarte mi agradecimiento te hice tú comida favorita – le servi el plato y papá me agradeció y me dio una nalgada

-papi, no hagas eso- dije juguetona

Y me senté a su lado haciendole compañía.

Conversamos normal, no se habló del tema y yo feliz.

-espero que no te moleste hacerme un espacio en tu cama está noche, tu mamá sigue molesta conmigo

-¿Qué? Lograste que me perdone a mí después que me encontró en eso, pero no lograste que te perdone a ti?

-no tengo ganas de estar suplicándole – me dice

-Bueno, claro que te hago un espacio en mi cama… pero solo a dormir – le aclaro

-obvio – me dice papá un poco molesto

Llego la noche y esperaba a mi papá en la cama, está vez con mi pijama, no voy a provocar al destino.

Se hicieron las 10 de la noche y mi papá no llegaba, supongo que se arregló con mi mamá, me decepcioné un poco, quería dormir acurrucada otra vez, pero creo que es lo mejor, así no me acostumbro

11 de la noche y entra mi papá, enciende la luz encandilandome los ojos, lo miro tambalearse un poco y me doy cuenta al instante que está borracho . Yo lo miro con mala cara mientras se sienta en la cama y empieza a desvestirse

-¿Y así esperas que te perdone mi mamá? – lo regaño con los brazos cruzados – ¿No te da pena que tú hija te vea así?

-mi amor no estoy tan borracho, solo estoy mareado.- se quedóen boxer y se mete en la cama, se acerca a mí y me da un piquito en la boca – perdón por hacerte epeerar

-¿Estás loco? No me beses en la boca – le digo sorprendida

-es que te ves tan bonita así, regañandone – me dice mientras direje su mano a mi barriga y empieza a acariciarme mientras me besa el hombro. Cómo puedo me lo quito de encima

-deja que estás borracho – me levanto de la cama y apago La luz. En lo que me meto en la cama papá no pierde tiempo y empieza a meterme mano, metió su mano por debajo de mi camisa y me tocó los senos. Me lo quité de un empujón y le dije

-Papi, sí me vuelves a tocar así te saco a patadas de aquí – digo molesta

Papa se disculpa apenado y se aleja lo más que puede de mí, me hace sentir mal tratarlo así, después de todo lo que hizo por mí hoy

Tres horas después me despierta los ronquidos de papá, ya no tengo sueño y apenas son las dos de la mañana. Cojo mi teléfono y me meto en facebook. Quería ver quién estaba en línea para poder chatear, Lalo fue uno de los primeros que ví.

Ya he hablado de Lalo anteriormente, fue mi novio por dos años y fue el que me quitó la virginidad, nuestra relación es de amor y odio, no lo soporto pero siempre terminamos echándonos algún polvo ocasional.

~hola – le escribo a Lalo por WhatsApp

~hola bebé, y ese milagro?

~no puedo dormir y ví que estabas conectado

~yo tampoco puedo dormir, ¿Quieres que te pasé a buscar?

~no puedo salir son las 2am y estoy castigada

~escapate, yo te busco

~no puedo

~mierda maholys, nesecito verte, te extraño

~me extrañas a mí o a mi cuerpo?

~los dos, ¿Estás desnuda? Mándame una foto

~ya tienes muchas fotos mías, no me digas que las borraste

~esas ya las he visto mucho

La conversación me estaba excitando, aparte me encanta que se hagan la paja pensando en mí, por eso le mando fotos mías desnuda a los que me la piden, si hay confianza obviamente.

Busco en mi galería de fotos, tengo cientos de fotos mías desnuda, empecé a mandar fotos cuando tenía 15 años y desde entonces no he parado, al principio las mandaba sin editar, pero desde que tomé conciencia empecé a taparme la cara con emojis

~quieres que te mande fotos recientes o de cuando era más pequeña? – le escribo

~que tan pequeña???

~15 años, justo después de terminar contigo

~uy que rico, a quien se la habrás mandado perrita

~quieres que te la envie o no???

~si, pero envíame también una reciente, quiero ver cómo estás ahorita

~ahorita estoy bien mojadita, por tu culpa

Le envio las fotos, 4 de cuando tenía 15 años y 6 de hace tres semanas

~ya te la puse dura????

~demasiaado

~enviame una foto de tu amiguito, que lo extraño mucho

Lalo me manda una foto de su pene y se despide

Yo me empiezo a tocar mirando la foto, mi dedo se desliza en mi interior y luego me lo meto en la boca, saboreo mi propio jugo y me lo vuelvo a meter en el coñito, al ver la foto un pensamiento pasa por mi cabeza, y papi la tiene más gruesa.

Un cosquilleo baja por mi vientre al pensar en meterme el pene de mí papá en mi cuca, “me dolerá, tengo la vagina muy pequeña, pero sería un dolor muy rico” siento como empapo mi ropa interior y ahora echo de menos a mí papá borracho metiendome mano hace unas horas.

Algo se apoderó de mí que empecé a quitarme el pijama, volví a quedar cómo la noche anterior, con mis senos descubiertos y solo mi pantys.

Me acerque a papá que seguía roncando, noté que se quedó dormido bocarriba cuando toque su barriga, no pensé en nada y lo abracé, le besaba el pecho mientras mi mano se metía dentro de su bóxer y tocaba su pene en modo de reposo, incluso flácido era gordo, yo sólo quería sentirlo adentro de mí, aunque no sé cómo iba a pasar.

Poco a poco su pene crecía en mi mano, no tardó un minuto en ponerse duro, ¿Y ahora que hago? No me voy a montar encima de él dormido.

Empiezo a darle besitos húmedos, empecé besandole el hombligo y fui subiendo poco a poco hasta llegar a su boca, mi papá dormido tenía la boca medio abierta mientras roncaba, podía sentir el aliento a alcohol.

Emprce a besarlo, metía mi lengua y rozaba la sulla, lo que hacía le dificultaba la respiración a papá.

Poco a poco siento como papá me corresponde el beso. Dios ya lo desperté, su mano bajan de inmediato a mis nalgas y me las aprieta mientras su lengua se entrelaza con la mía. Tal vez siga borracho, me estará confundiendo con mi mamá, necesito aclararle que soy yo.

-papi, soy maholys – le digo deteniendo el beso

-lo sé – lo dice y me da un piquito

-¿Todavía estás borracho?

-no

-¿y no te molesta que sea yo?

-tal vez en un rato si me moleste pero ahora no – me dice mientras me aprieta la entrepierna con su mano

-ahhh – un pequeño gemido escapa de mi

-papi, quiero que me hagas el amor

Papa se queda inmóvil un momento, como si estuviera meditando su decisión

-no tienes que hacerlo si no quieres… – empiezo a decir pero papá me tumba y se monta encima de mi, rápidamente me abre las piernas con las suyas y se saca el pene sin bajar el bóxer. Me besa apasionadamente y luego me baja mi pantys, yo lo ayudo con mi pierna, inmediatamente mi papá apunta su pene en mi sexo húmedo

-papi, papi, espérate!

-¿Qué?

-hazmelo con cuidado, que la tienes muy grande para mí.

Mi papá me vuelve a besar y poco a poco hace presión en mi entrada. La cabeza entra sin problema dentro de mí haciendome gemir, era la sensación que quería, un dolor rico. Papá iba empujando lentamente, sentía como entraba milímetro a milímetro dentro de mí, mientras más me entraba su pene el dolor se intensificaba, pero el placer era superior. A mís 17 años ya me he acostado con seis personas diferentes, pero era la primera vez que me estaba cogiendo un hombre de verdad, mi papá

Me costaba no gritar, si de por sí yo soy ruidosa en el sexo, con una verga tan gorda como esa era casi imposible estar callada

-Ahhhhh – no pude evitar dar un grito cuando de un solo golpe mi papá me la metió hasta el fondo, mi papá se asustó e inmediatamente me tapó la boca.

Yo no podía creer que me podía sentir tan llena, creo que la única vez que me sentí parecido fue cuando Lalo me desvirgó a mis 12 años

-ssss estás muy apretadita – me susurra

-te gusta apretadita papi? – le digo con voz sexy

Mi papá me besa y luego me mete mi panty en la boca

-intenta no hacer ruido – me dice mientras empieza a sacar poco a poco su pene hasta dejarme vacia, luego me la vuelve a meter de golpe

-mhhhhhh – grito con la boca cerrada y llena con mi panty

Papa empieza un mete y Saca muy delicioso. Después de la sexta metida y sacada lo detengo

-el colchón está haciendo mucho ruido, mi mamá se va a despertar

Papa se detiene por un momento pero me lo vuelve a meter y sacar haciendo que el colchón vuelva a sonar

-!para papi, para! No lo podemos hacer en la cama… bájate un momento

Papa me lo saca y se acuesta a mi lado frustrado, yo me levanto de la cama y le digo

-papi, tápate los ojos

-¿Para que?

-voy a encender la luz y no quiero que me veas desnuda… ¿Ya lo tienes cerrado?

-si encendí la luz y papá tenía los ojos cerrados

Vuelvo a la cama y cojo una almohada – no abras los ojos – le digo. Pongo la almohada sobre mi silla de escritorio y la acerco a la cama. Tomo a mi papá de la mano y lo dirigí al lado de la silla. Me puse de rodillas sobre la silla dejando el culo en pompa como si estuviera en cuatro

-no abras los ojos pero tocame

Papa empieza a tocarme y se da cuenta en posición que estoy

-Dios maholys – decía mi papá excitado

Inmediatamente se colocó detrás y apunto nuevamente a mi entrada

-ohhhh – exclama mi papá al volver a penetrarme lentamente

-mhhhh – tengo que apretar los dientes para no gritar, aún no me acostumbro a su grosor, el dolor sigue estando pero el placer lo vale

Papa me la mete lento hasta el fondo y me besa la nuca mientras me aprieta los senos con la mano

-te amo – me susurra al oído

-y yo a ti papi

De repente papá me la saca y me la mete de golpe dos veces y las dos veces me hizo gritar

Se nota que me quería comer duro, me quería hacer gritar pero no podía, mi mamá duerme en el cuarto de al lado

Me la empieza a meter lento y suave, siempre metiendomela hasta el fondo.

Acelera el ritmo y lo baja cuando nota que no puedo reprimir mis gemidos

-maholys eres la mujer mas hermosa del mundo – dice mientras entra y sale muy lento de mi coñito que ya empieza a acostumbrarse a su trozo de carne

volteo para verlo y noto que tiene los ojos abiertos

–papiii, te dije que no quería que me vieras – digo con ganas de llorar, una parte dentro de mí creía que mientras no viera desnuda no se rompería nuestra relación de padre e hija y cambiaría a hombre y mujer

-no puedo no mirarte, eres perfecta – su palabras no ayudan, no quiero que me vea como una mujer deseable

De pronto empieza a acelerar el ritmo e intuyo que está por venirse

-No me la heches adento – le pido

-te la quieres tragar? En realidad no quería, no me apetecía tomar leche, pero cuando me la sacó y me hizo voltearme tampoco me iba a resistir. Me senté en la silla y me la metí en la boca, su pene estaba empapado de mis jugos, pensé en lo que me ha hecho gozar que se me quitó el mal humor

-avisame cuando te vengas- le digo y me la vuelvo a meter, me sigue costando trabajo metermela sin lastimarlo con mis dientes, me considero buena mamadora y estoy quedando muy mal con mi papá, el se merece la mejor mamada de mi parte, para eso nesecito práctica, en el fondo sabía que está no sería la última vez que tendría el pene de mi papá en la boca

-voy, voy, voy… ahhhhh

Papa me volvió a rociar la garganta de proteína, está vez no se me derramó ni una gota.

Me lo tragué todo, le limpio su hermosa y suculenta cabeza y luego lo miro a los ojos

Papa me hace parar de la silla y me abraza, es un abrazo paternal, luego nos separamos y me da un piquito

Apagamos la luz y nos volvimos a acostar, yo con Miles de pensamientos en la cabeza pero bien cojida.

Hasta aquí la segunda parte, les recuerdo que todo esto es cierto y pasó hace un poco más de un mes, sigue pasando hasta el día de hoy, dejé de ser su hija, me tiene como su segunda mujer. ¿Creen que pueda volver a verme como una hija o definitivamente lo perdí cómo padre?

Me gusta lo que está pasando entre el y yo pero preferiría búscame un novio de verdad y que el se quede cómo padre, pero creo que él no lo aceptará.

Les cuento que por lo menos a dejado de beber, lo que se ahorra en botellas de ron lo gasta en mí, me compra ropa, me está pagando mi academia de modelaje, en ese sentido si me gusta ser su mujer, antes no me compraba nada.

Capitulo 3

Ya era sábado, segundo día seguido que amanezco desnuda en los brazos de mi papá. Me despierto al sentir que me acarician la mejilla, abro los ojos y el rostro de mi papá está a 10 cm de mí, sonrio al verlo y le doy un besito.

Papá no me dice nada, sólo me sigue acariciando la mejilla

-Dormiste bien papi?

Papá me sonríe y me besa la frente

-me gusta despertar contigo – le digo, papá no me responde, sólo me sigue acariciando

No sé porque lo hice pero me nació besarlo, lo besé y papá me correspondió, estuvimos así un buen rato, besar es de las cosas que más disfruto

-te quiero – le digo y papá me abraza apretándome contra el, me gusta que me abrace, me siento protegida, en sus brazos siento que nada malo puede pasarme

-te arrepientes? – Le pregunto viéndole a los ojos

-no… me gustaría quedarme todo el día así contigo – me dice y le sonrio

-yo tampoco me arrepiento

Nos quedamos abrazados hasta que me dieron ganas de orinar

-tengo que ir al baño… ¿Puedes taparte los ojos? Me tengo que vestir

-¿Es enserio? – dice papá con una risita

-si, y por cierto no me gustó lo que hiciste anoche, te dije que no quería que me vieras desnuda – le digo y papá se pone serio y borra la sonrisa

-¿Qué? – le pregunto al verlo serio

-esta bien, vístete, no te voy a ver -!lo dice y voltea la cara para no verme

-¿Estás molesto?…. ¿Dije algo malo? – le pregunto confundida

-no – me responde serio

-ya te arrepentiste, ¿Verdad? – le digo y su silencio me hace entender que si lo está – estás molesto conmigo?

-no, estoy molesto conmigo, no debí dejar que esto pasara – su respuesta me dolió, sé que tiene razón, es mi papá y se siente culpable, pero en ese momento lo ví como un hombre arrepentido de hacer el amor conmigo. Me puse triste, baje la mirada y le dije

-perdoname, fue mi culpa, yo empecé todo – le digo desanimada

-No, fue mi culpa – dice papá – yo soy el adulto … y me aproveché de ti

-no digas eso – lo interrumpo y con mi mano hago que me mire a la cara – tú no te aprovechaste de mi, yo te quiero y no me arrepiento – intento besarlo y papá me esquiva

Me duele sentirme rechazada, lo amo, en ese momento mi cerebro bloqueó que era mi papá. Me monto encima de él y con mis dos manos sostengo su cara para que me mire a los ojos, el me mira y lo beso.

Papa no se quita pero no me corresponde, 10 segundos después de besarlo sin ser correspondida me detuve, me sentí mal y por un momento me rendí, pero tomé valor y jugué mi última carta, aún montada encima de él me descubro de las sábanas enseñándole mi desnudez, en cuanto lo hago papá mira hacía otro lado para no mirarme, con mis manos hago que me mire

-mírame y dime a la cara que te arrepientes – le digo, mi papá intenta no ver pero lo termina haciendo, me mira mis senos, su mirada baja lenta hasta ver cómo estoy montada desnuda encima de él

Siento como su pene aplastado por mi cuerpo empieza a ponerse duro debajo de mí, papá me aprieta suave las nalgas, aprovecho que empieza a ceder y me acerco para besarlo pero me detengo a centímetros de su boca, no quiero que me vuelva a rechazar.

Lo miro a los ojos sin atreverme a besarlo, está vez es papá quien da el paso, pone una mano en mi nuca y me acerca hasta juntar nuestros labios, al sentir su pene duro debajo de mí instintivamente empiezo a mover mis caderas.

-Ahhh – Gadea papa

Siento que me empiezo a mojar, pero también siento unas ganas horrible de orinar, detengo el beso y le digo

-Tengo que orinar – papá me da un piquito y me suelta – ya no me molesta que me veas – le digo levantándome de la cama desnuda y me empiezo a vestir, papá no me pierde de vista y me alegro de eso. Le pico el ojo y le lanzo un besito y salgo de mi habitación hacía el baño.

De camino me encuentro con mi mamá en la cocina, me saluda normal, quería empezar una conversación conmigo pero la dejé porque me estaba orinando

-Tu papá está en tú cuarto? – me pregunta mi mamá cuando salgo del baño

-si

-llego borracho verdad?

-no – miento, no quiero que mi mamá se moleste porque mi papá llegó borracho – mami, no crees que exageraste corriendolo de tu cuarto?

-yo no lo corrí, él fue quien no quiso dormir conmigo, por mi puede hacer lo que quiera, yo no le voy a pedir perdón cuando el es el que está mal– me sorprendió escuchar eso, mi papá me había dicho que ella no lo dejaba dormir en su cama

-oye voy a ir a la peluquería en un rato, ¿Quieres venir conmigo? – me dice mi mamá

-¿Enserio? Me dijiste que no me ibas a dejar salir en un año

-¿Quieres ir o no? – me dice

La verdad es que no quería ir, me hubiera gustado quedarme con mi papá, aprovechar que no iba a estar mi mama, al final insistió tanto que terminé aceptando

Entré en mi habitación, papá seguía ahí, se había puesto los pentalones pero seguía acostado en la cama. Cerré la puerta con seguro y me le monté encima. Empecé a besarlo, y menearme encima de su pene.

El beso se estaba volviendo apasionado cuando papá me detuvo, me miró a los ojos y me dice

-maholys tenemos que hablar

-ay no, ya te arrepentiste otra vez – digo fastidiada. Lo vuelvo a besar y él me corresponde pero lo detiene después de unos segundos

Veo que está incómodo con mis muestras de cariño así me quito de encima de él decepcionada y dejo escapar un largo suspiro de frustración, me acuesto a su lado y me quedo mirando al techo

-acaso yo no te gusto? – le digo

-eres mi hija – me dice y le miro a los ojos – no podemos seguir así, aparte tu mamá…

-mi mamá no te quiere – le interrumpo y papá me mira sorprendido – me acaba de decir que no le importa lo que hagas, no le importa que no quieras dormir con ella

-es porque está molesta – me dice

-y tú tampoco la quieres a ella, si no no le hubieras puesto los cuernos conmigo – le digo y pasó algo que me sorprendió, por primera vez en la vida papá me da una cachetada, no me dio fuerte pero el sólo echo de la acción me dio ganas de llorar.

Inmediatamente papá empieza a disculparse, me abraza pero yo me quiero soltar, me siento dolida

-suéltame – le digo y papá me sigue abrazando

-perdóname mi amor, perdóname – dejé de intentar zafarme de sus brazos y empecé a llorar en su pecho

Pasamos como tres minutos así, cuando dejé de llorar le digo

-me puedes soltar? Voy a salir con mi mamá y vine a cambiarme

–adonde van? – dice papá al mismo tiempo que me suelta

-a la peluquería, ¿Puedes irte de mi habitación por favor? Necesito cambiarme – le digo sería

-primero tenemos que hablar

-no hay nada que hablar, entiendo todo, perdóname por besarte, es que pensé que me querías… Pero ya veo que me equivoqué

-maholys yo… – papá no encuentra las palabras y yo le evito molestias

-no tienes que explicarme nada, no soy una niña, solo me duele que lo que pasó anoche no significó nada para ti

-Maholys no es eso, sabes que…

–papi, por favor no digas nada y vete

-no puedo irme así, sabiendo que estás molesta conmigo

-no lo estoy – miento, papá se queda de pie mirándome sin creerme, sé que no se va a ir hasta que sienta que estamos bien, así que me acerco y le doy un abrazo falso, me separo y papá sigue sin moverse.

-Maholys se que sigues molesta

-no lo estoy – inconscientemente le doy un pico en la boca para demostrarle que no estoy molesta, aunque si lo estoy – perdón – me disculpo al darme cuenta que lo besé en la boca, papá me queda viendo los labios, los abro un poco para volver a disculparme pero los labios de mi papá impactan con los míos.

Me sorprendió, me quedé paralizada y no le correspondi el beso, papá sé separa y empieza a hablar pero está vez soy yo quién lo beso, lo empujo hacia mi cama y caemos sobre el colchón, yo encima de mi papá nos besamos con pasión. Papá me tumba a su lado y se pone encima de mi, me sube la camisa hasta dejar mis senos a la vista y vuelve a besarme, papá atrapa mi seno izquierdo con su mano y me lo empieza a apretar muy rico, poco a poco me voy calentando, siento un cosquilleo que baja por mi vientre y como se humedece mi sexo.

Papa me deja de besar para meterse mi seno en la boca, su lengua jugaba con mi pezón mientras su mano baja por mi vientre hasta llegar al borde de mi pantalón de pijama, sus dedos se desliza debajo de la tela y empieza a acariciarme lentamente la zona del pubis, su mano sigue bajando y yo abro mis piernas para que me toque mejor.

-mhhh – gimo cuando siento sus dedos pasar por mi rajita

Papa saca su mano, se levanta de la cama y de un tirón me baja el pijama hasta las rodillas, dejando mi vagina húmeda a la vista.

Mi respiración ya está acelerada, quiero volver a sentirlo adentro de mí. Papá se dispone a terminar de bajarme el pantalón cuando el sonido de alguien tocando mi puerta lo detiene en seco

-Maholys, la comida está lista, vístete para que comas e irnos a la peluquería – dice la voz de mamá detrás de la puerta

-ok, ya voy – grito con voz chillona, me levanto de la cama y beso a mi papá en el cachete –sera en otra oportunidad – le digo y empiezo a desvestirme, papá se acuesta frustrado sin perderme de vista

Elijo el tanga más provocador que tengo, negro de esos que se nos meten en las nalgas, meto mis dos pies en el y me lo subo lentamente. Luego me pongo mi pantalón de licra negro que se ciñe perfectamente a mis piernas y trasero

-Esta licra me transparenta mí ropa interior? – Le pregunto dándole la espalda para que me vea

-si, se nota mucho que llevas tanga, no te vas a poner eso – me dice mi papá

-no importa, me amarro un suéter a la cintura – le digo mientras me terminó de vestir

-estoy bonita?

-mucho, pero no me gusta que salgas con eso licra, transparenta mucho y está muy ceñida, no quiero que los hombres te queden viendo

No sé si lo dice porque es un padre protector o porque está celoso, me termino de vestir y me dirijo hacia el, le doy un beso en la boca y luego me despido

Despues de desayunar salgo de la casa con mi mamá,nos fuimos caminando pues la peluquería está a 10 minutos.

Se me olvidó ponerme el suéter en la cintura, todos se me quedan viendo por detrás, no sólo los hombres también las mujeres, supongo que los hombres me están comiendo con la mirada y las mujeres me están criticando.

Creo que me lo busqué, está licra se ciñe tanto a mi cuerpo y la tela es tan delgada que da la impresión de que estoy desnuda, probablemente el tanga que llevo puesto se esté marcando bajo la tela.

Me siento incomoda, me gusta que me vean cuando estoy bonita, es decir que me vean la cara, el pelo, pero no me gusta que me vean el culo, bueno a veces si me gusta, pero hoy no. Talvez no me entiendan, yo tampoco me entiendo. Me gusta que me mire con deseo, aveces.

-acuérdame de comprar ingredientes para tortas, tú papá cumple años mañana – dice mí mamá mientras caminamos hacia la peluquería

-si es cierto – caigo en cuenta – se me había olvidado – le digo – ¿Y le vas a hacer una torta? Pensé que estabas molesta con él

-si pero… no es para tanto, aparte mañana van a venir toda la familia, yo no voy a estropearle su cumpleaños

Y en mi mente pienso “pero si pudiste arruinarme el mío, no me dejaste celebrar mi graduación y tampoco mi cumpleaños” sé que está mal decirlo pero le guardaba rencor a mi mamá, creo que por eso no me sentía culpable con lo que está pasando con mi papá. Gran parte de mi sufrimiento fue por causa de mi mamá, y creo que ella lo sabe y quiere redimirse llevándome a la peluquería, pero pienso también “¿Por qué no me dejaste ir a una peluquería para ir a mi graduación? Tuve que ir desarreglada y con ojeras marcadas de tanto llorar por su culpa.

-van a venir los tíos de Caracas?? – le pregunto a mi mamá

-si

-y dónde se van a quedar, ellos son muchos y no van a caber todos en el cuarto de Miguel (mi hermano)

-tendrás que dejarles tu cuarto

-¿Y dónde voy a dormir yo? – digo interrumpiendola

-con nosotros, si soportaste dos días a tú papá uno más no será tan grave.

Me Hubiera gustado decirle que no me molesta dormir con mi papá, me molesta dormir con ella

Me vino a la mente preguntarle algo que para mí era una certeza pero necitaba oírlo de su boca

-tu ya no quieres a mi papá¿verdad? – le suelto y mi mamá se sorprende

-¿Por qué me preguntas eso?

-porque hace tiempo que ya no eres cariñosa con él, tengo tiempo que no los veo besarse – “y hace tiempo que no los oigo coger” pensé en decirle pero me mordí la lengua

-claro que lo quiero, es normal que ya no seamos tan cariñosos, tenemos más de treinta años juntos – me dice

-pero tu no lo amas – le digo, quiero que lo acepte, si logro que me diga que no lo ama siento que tendré vía libre con mi papá

-Maholysyo estoy con tu papá desde que tengo 15 años, claro que lo amo, no me imagino vivir sin él

Escucharla decir eso me rompió el corazón, ahora me siento culpable, me acosté con su novio de toda la vida, no puedo seguir haciéndole eso a mi mamá, y lo peor de todo es que siento que me enamoré de mi papá, siempre lo he querido pero desde que hicimos el amor siento que lo amo.

Llegamos a la peluquería, desde que hablamos de eso no dije más nada, cuando me preguntaron que me iba a hacer no sabía que decir, tengo el pelo liso y me lo cuido mucho, que me puedo hacer, se me ocurrió pintarmelo todo de azul como Karol G, pero si no me lo hacían bien me iba a ver muy ridícula, así que les dije que me hicieran unas mechitas azules, me quedaron muy bien la verdad, me sentí feliz por un momento.

2 horas después salimos de la peluquería, mi mamá se fue a comprar los ingredientes para la torta y yo me fui camino a casa, recibí muchos elogios por mi cambio de look y muchas miradas de hombres que si no hubiera gente alrededor estoy segura que no se contendrían en arrancarme la licra y violarme en medio de la calle, eso es lo que pienso al ver su mirada clavada en mi culo si ningún disimulo.

Llegue a casa y en la entrada estaban mis hermanos con sus amigos, ellos se burlaron de mi pelo pero yo estoy segura que me quedó muy bien, solo se burlan para fastidiar, los ignoro y sigo mi camino, no sin darme cuenta de las miradas de los amigos de mis hermanos fijas en mis nalgas.

Entre directo en mi habitación y lo primero que hice fue verme al espejo, no para verme el pelo, estoy segura que me veo super bien, lo que me veo es que tanto mostré con esta licra, mi tanga se dejaba ver claramente.

-cambio de look, te quedó muy bien – dice mi papá recostado en el marco de la puerta y yo le sonrió

-gracias

-y tu mamá???

-fue a comprar algunas cosas, por cierto se me había olvidado que cumples años mañana, casi me voy peleada contigo

Papa me sonríe y entra en mi habitación cerrando la puerta, estaba teniendo que lo hiciera, me prometí a mi misma que no iba a continuar con esto, por mi mamá.

No quise verlo a los ojos y le di la espalda fingiendo que me estaba viendo en el espejo.

Papa se me acerca y me abraza por la espalda, cerré los ojos al sentir como me envuelve en sus brazos, no sé si lo hacía a propósito pero sentía que me restregaba el paquete por detrás.

-mnnh – suelto al sentir sus besitos en mi nuca y como sus manos tocan mis pechos por encima de la camisa. Un deseo de que mi papá me ponga en cuatro y me coja duro me entra en la cabeza

-papi no – le digo muy suave mientras me sigue apretando los pechos, me muerdo el labio inferior al sentir sus besitos, su mano derecha empieza a bajar por mi vientre y mete sus dedos por debajo del elástico de la licra, me empieza a acariciar por encima de mí tanga y la sensación es súper súper deliciosa.

Pero me armo de valor y lo detengo, le retiro su mano de mi entrepierna y me volteo quedando cara a cara con el

Papa empieza a besarme el cuello y sus manos atrapan mis nalgas. Sin detener lo que me hace le digo

-no podemos seguir con esto, no está bien… ahhh – gimo cuando los dedos de mi papá rozan mi vagina por encima de la licra, así de delgada es la tela que sentí que me tocaba directamente. Lo detengo y hago que me mire

-es enserio, no podemos seguir con esto – digo con autoridad – tu tenías razón Papi, esto está mal, no le puedo hacer esto a mi mamá

Mi papá deja escapar un largo suspiro y se sienta al borde de la cama, yo me siento a su lado

-si, tienes razón – dice frustrado mientras se pasa la mano por la frente – creo que me tendré que distanciar de ti por un tiempo, hasta que se me pase esto

-¿Qué? No yo no quiero eso – le digo – solo quiero que volvamos a ser como antes

-yo también maholys pero tienes que entender, te veo y solo quiero besarte – me dice y yo bajo la mirada – perdóname hija esto es culpa mía – me dice y se para de la cama – si notas que te evito no pienses que estoy molesto creo que va a ser lo mejor, me dice y se dirige a la puerta.

Yo me levanto rápido y corro para impedir que se valla, me recuesto de la puerta estorbandole su salida

–maholys déjame pasar

-no papi, tu sabes lo que me dolió perder a mi mamá, no puedo perderte a ti

-no me vas a perder, solo nos tenemos que distanciar un tiempo

-no, prefiero entonces seguir cómo estábamos – le digo desesperada

-eso no puede ser y tú lo sabes

-si puede, ¡Besame! – le ordeno pero papá no lo hace, intento besarlo yo pero me evita, se que el quiere esto, sólo tengo que quebrar su voluntad. Me quito la camisa y me bajo la licra

-Maholys para! – me dice y yo ya estoy en ropa interior

Lo empujo hasta que cae sentado en el borde de la cama, no pierdo tiempo y me monto encima de él, empiezo a besarle el cuello y ya papá dejo de resistirse, intento besarle en los labios pero me esquiva, yo me quito el sujetador y rompo su resistencia, en los últimos dos días he notado que mis pezones rosados son una debilidad para él, sonrio al darme cuenta como me queda viendo y siento su pene ponerse duro bajo su pantalón.

Me bajo de mi papá y me arrodilló entre sus piernas, les desabotono el pantalón y se lo bajo hasta las rodillas

-Maholys no de… mhh – papá gime cuando le doy un chupón a la cabeza del pene por encima de la tela de su bóxer

Con su ayuda le bajo el bóxer hasta los tobillos, y le sonrió mirándolo a los ojos , papá me esquiva la mirada pero no me importa, si esto es lo que tengo que hacer para que no se aleje de mi lo voy a hacer. Le paso la lengua por el glande recogiendo esas gotas que se acumulan en la punta, empiezo a darle lengüetazos como si fuera una paleta, lo hago hasta dejarme el pene lleno de saliva, antes de metérmela en la boca miro a los ojos a mi papá mientras le doy un besito a la punta del pene.

Sonrió al ver su reacción de excitación y me lo meto en la boca, aún no me acostumbro a metérmelo bien en la boca, lo tiene muy grueso, me gustaría tragármelo hasta que me llegue a la campanilla pero le haría daño con mis dientes, así que acepto mi derrota y solo me concentro en meterme un tercio de su pene en la boca mientras lo masturbo con mi mano.

Se que una mamada no será suficiente para retener a mi papá, necesito volverlo mas personal, me concentro en dejarle el pene bien baboso con mi saliva, le doy un último chupón que sonó como si le hubiera lanzado un beso. Me pongo de pie y me terminó de quitar él tanga, me monto encima de él con una rodilla a cada lado quedando abierta y lista para recibir el grueso pene de papi, lo sujeto con mi mano mientras voy bajando poco a poco, dirijo su pene a mi entrada y me dejo caer lentamente

-ayyy – me quejo al sentir como se estira mi apretada vagina por el paso del pene de mi papá, yo intento bajar más lento para evitar gritar pero mi papá me jala por las caderas hacía abajo haciendo que me entre completa, estoy segura que si hubiera alguien dentro de la casa hubiera escuchado sin ninguna duda el grito que solté

-AHHHHHH… eres malo – digo adolorida mientras se me escapa una lágrima

-dios maholys, eres lo mejor de este mundo – me dice papá

Subo unos centímetros y me vuelvo a dejar caer sobre su pene

-me siento muy llena – le digo – la tienes muy grande, tengo que hacerlo lento para no gritar – digo empezando a subir y bajar, no se imaginan la gozada que estaba sintiendo, sentir el pene grueso de mi papá entrar y salir de mí es una delicia, supongo que para los hombres es el equivalente a una vagina húmeda y apretadita, que es lo que estaba sintiendo mi papá conmigo

Lo hacía muy lento para disfrutar del acto pero mi papá me cogia de la cintura e imprimia su propio ritmo, haciéndome soltar algunos griticos, estoy segura que desde la primera vez me quiere coger bien duro, me quiere hacer gritar, a su hija de 17 años

-papi no tan fuerte que mis hermanos están afuera de la casa con sus amigos.

Papa se dejó caer en la cama y me dejó todo el control, yo lo hacía muy lento y delicioso, no solo quería sentir despacio su pene llenándome, también lo hacía para controlar el ruido del colchón

Empecé a acelerar el ritmo cuando sentía que estaba cerca de tener un orgasmo, no me importó nada y empecé a cabalgar rápido, me lo sacaba casi completo y me dejaba caer de golpe, el ruido del colchón ahora era constante al igual que mis gemidos, por un momento deje de estar pendiente de que alguien entrará en la casa y empecé a subir y bajar sobre mi papi como si no hubiera mañana, el grito que pegué cuando llegué al orgasmo fue tal que creo que se pudo haber escuchado afuera de la casa

Me sentí en la gloria, me dejé caer encima de mi papá sin sácame su pene, el aún no había terminado

Papa empieza a mover sus caderas para seguirme cogiendo, yo solo me abandoné al placer y dejé que el siguiera, pero lo que me hacía me volvió a prender, me vuelvo a incorporar apoyando mis manos en su pecho y empiezo a mover mis caderas, así como lo hago en mis videos de tik tok, pero en mis videos lo hago con unos shortsito pequeños, aquí estoy desnuda montando el pene grueso de mi papito

Ahhhh – empiezo a gemir

A mis 17 años y con toda mi experiencia en el sexo, creo que estaba teniendo el mejor polvo de mi vida, gran parte por el morbo, gran parte por lo grueso que es mi papá, siento que estoy cerca de otro orgasmo cuando un sonido casi hace que me dé un infarto.

Es la voz de mi mamá, está hablando con mis hermanos, están entrando en la casa

-cerraste con seguro – le pregunto aún sentada en su miembro, papá me dice que si – pásame mi teléfono – le digo a mi papá que lo tiene al lado, papá me lo pasa y pongo la música a todo volumen, empecé a moverme despacio sabiendo que lo único que nos delataría es el ruido del colchón, empiezo a subir rápido y bajar lento, subir rápido y bajar lento, escuchar la voz de mi mamá conversar con mis hermanos solo logro excitarme más, sentía que estaba a punto de acabar, la respiración acelerada de papá era opacada por la voz de Bad Bunny en mi teléfono, empiezo a acelerar el ritmo, siento que estoy a punto, la música opaca el ruido del colchón, estoy apunto y de repente, acaba la música, me quedé quieta sin moverme hasta que empezara la siguiente, en cuanto comenzó volví a retomar el ritmo, estaba tan pendiente de mi placer que no pensé en mi papá, no me dí cuenta que estaba por venirse hasta que sentí como vibraba su pene en mi interior y como soltaba chorros y chorros llenándome de leche, sentía como mis hermanitos nadaban en mi interior en busca de mi óvulo para dejarme preñada, el sentir el placer de la leche de papá recorriéndome por dentro hizo que me corra delicioso.

Me tumbe a su lado intentando recuperar el aliento, escuchaba la música de fondo, una música que nunca olvidaré, la música con la que mi papá se vino adentro de mi por primera vez. “Ojos marrones de Lasso” se ha vuelto nuestra canción hasta el día de hoy

Por MAHOLYS05

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