Vacaciones

 

Desde que ya vivimos juntos los tres, comencé a notar esa aceptación por parte de Estefany, al principio pensé que por la figura paterna, pero he visto que iba más allá que eso, había una atracción sexual. Ella suele estar con poca ropa en la casa, eso me saca de quicio, sus pies son bellos largos y delgados como de una modelo, y sus senos son puntiagudos pequeños, todo eso me ha sacado más de una erección dentro de mi casa. ahh y lo tradicional, que he leído en varios relatos, cuando su madre no está cerca, me saluda de beso media mejilla y medio labio, eso me eriza la piel y me erecta mi pene que es de buen tamaño. También le gusta tirarse a la alfombra en la sala cuando veo televisión, lo hace con diminutos shorts o faldas muy cortas enseñándome sus braguitas que usa que son muy cortitas y sexys.

Cuando vamos a la playa o a alguna piscina, verla en bikini es todo un espectáculo, tiene cuerpo de modelo, delgada con bonitos senos y una figura sensual, me dan ganas de arrancarle su traje y poseerla en ese mismo momento. Ella me despierta lo que a veces creo que yo creo que está dormido. Y lo mejor es que ella lo hace intencionalmente para llamarme la atención.

Un mes antes del suceso que quiero relatarles, fue su cumpleaños número 18, y le regalé una laptop Sony, se la di a solas en su habitación, ella lo abrió, lo vio y me abrazó y buscó mis labios directos, fue un beso de unos 10 segundos, pero nos tocamos las lenguas, luego me soltó, se puso sonrojada y yo no salía de mi impresión, luego se rio de forma picara. Creo que ese fue el detonante que esperaba con ansias.

Tres semanas antes del suceso, íbamos los tres y entramos al parqueo subterráneo de un centro comercial, mi esposa necesitaba comparar algunas cosas en el supermercado, decidimos esperarla en el auto, Estefany iba de copiloto. Ella me dijo que estaba cansada si podía acostarse en mis piernas, hice mi asiento hacia atrás, para darle lugar y que el timón del auto no estorbara, había una atmosfera muy cargada entre ella y yo, ella se acomodó boca arriba con la cabeza en mis muslos, nos quedamos viéndonos a los ojos, de repente como por un imán, yo fui bajando mi cabeza y ella subiéndola y nos besamos en forma muy ardiente, como desesperados, nuestros labios y lenguas se frotaban salvajemente, mi verga crecía en mis pantalones, sus brazos me tomaron de la cabeza y los besos tronaban en el auto, que por suerte es polarizado totalmente, mis manos le acariciaban su estomago, su piel era tersa como de un bebe, ella llevaba puesto una blusa y un short sencillos.

Pasaron cinco minutos, diez minutos, ella y yo nos pasábamos saliva con la lengua, nuestra excitación era evidente, deslicé una de mis manos entre su short, toqué la orilla de su braguita y sin más, seguí deslizando mi mano por debajo de su braguita y pude sentir lo áspero de su vellos púbicos rasurados, luego sentí algo suave, había llegado a su cuquita, recorrí delicadamente con mis dedos su sexo, sus delgados labios vaginales, lo hice de arriba a abajo y viceversa, era increíblemente erótico y sensual, ella soltó mis labios y viéndome hizo una carita de excitación y gimió, luego volvió a buscar mis labios y lengua. Mis dedos acariciaron ardorosamente su rajita, recorrí la rayita que divide sus dos labios vaginales y la punta de mi dedo ingreso en medio, inmediatamente detecté que Estefany estaba emitiendo sus juguitos lubricantes, lo que toda hembra emite cuando está excitada, mojé la punta de mi dedo con esos juguitos, Estefany volvió a soltar mis labios y gimió varias veces. En eso estábamos cuando vi que mi esposa se acercaba a no más de 20 metros del auto, por el polarizado ella no veía nada, yo le dije a mi hijastra, -hey tu mamá!- ella rápidamente se acomodó a su asiento y se arregló la blusa y su short, y allí quedó por el momento.

Yo después de eso, quedé muy emocionado, los siguientes días, cuando tuve sexo con mi esposa, pensaba en que era Estefany a quien le hacía el amor, eso ponía mi verga durísima y le daba duro a mi esposa, quien estaba contenta con eso.

En esos días estábamos planificando una vacaciones entre todos, y decidimos ir a Miami, cada quien llevaba su objetivo, mi esposa dijo que de compras, había ahorrado, ya que ella también trabaja, la playa y usar mis bikinis dijo Estefany, en mi caso dije descansar.

Unos días antes del viaje, estuvimos viendo una peli en nuestra habitación, yo estaba en medio de mi esposa y Estefany casi siempre, ambas se recostaban en mis brazos y hombros, pero nos dio entrada la noche y todos nos quedamos dormidos, apagué la tv, vi a ambas dormir y yo también lo hice, pero una media hora después, sentí que una mano delgada se metí en los pantalones de mi pijama y acariciaba lo largo de mi verga, no abrí los ojos de inmediato, de hecho pensé al principio que era un sueño, pero las caricias siguieron, mi verga se fue poniendo larga y dura, la pequeña mano la tomó y comenzó a hacerme una rica paja lenta, abrí los ojos y me di cuenta que venía del lado de Estefany, la vi y ella me vio, a pesar que todo estaba en penumbra, voltee a ver a mi esposa y ella estaba profundamente dormida, Estefany siguió hasta que me hizo acabar allí acostado, esparció semen en toda mi pijama y en la mano de ella, se levantó, me dijo -buenas noches papi!- y se fue a su habitación, dejándome allí eyaculado.

Llegó el viaje, nos fuimos en aerolínea, nos instalamos en el hotel que tenía playa privada. Cada quien se acomodó, mi esposa y yo en una habitación y Estefany en otra, nos pusimos ropa cómoda cada quien, como ya era de noche fuimos a cenar al restaurante del hotel y caminamos un momento por la playa. Mañana sería el gran día.

Temprano mi esposa dijo que iría de compras, yo dije que me quedaría a descansar en la habitación y Estefany dijo que iría a la playa a conocer chicos. Ella se puso un bikini de dos piezas, se miraba como una hembra rica. Me quedé en la habitación, en realidad si quería descansar un rato y luego iría a la playa con Estefany.

Pasó una hora creo, y yo estaba viendo tv acostado en la cama, torso descubierto y en bóxer, cuando veo entrar a Estefany, ella viene en traje de baño, solo que arriba tiene puesta una camiseta, parece una barbie de las de antes, linda figura y delgado cuerpo. Se empieza a subir a la cama de frente a mi, yo solo la veo y me quedo inmóvil, ella se sube a gatas, se mete entre mis piernas y me besa los muslos, la chica venía decidida, luego llega a mi bóxer y besa mi bulto, que va creciendo rápidamente, sigue besando mi bulto y lo atrapa entre sus manos, lo muerde delicadamente, yo solo soy un espectador pero me saca gruñidos e placer, luego me va bajando el bóxer, exclama algo sobre el tamaño dé mi pene y ahora me lame la verga atrapada por sus delgadas manos como si fuera un sorbete, siento su húmeda y caliente lengua recorrer mi falo, es una delicia su lengua.

Estefany se va comiendo mi verga con largas lamidas y varios chupones fuertes, me está dando una tremenda mamada. Yo solo atinó a acariciar su cabello castaño, luego toma mi verga con una mano y la levanta, solo para poder llegar a lamer mis huevos, uff que rico siento su lengua recorrer mis bolas, luego engulle mi glande y lo succiona rico, yo cierro los ojos para concentrarme esa suculenta chupada que me da mi hijastra, era lo que había soñado durante muchas noches, que va, era mejor esto todavía.

Ella se detuvo solo un momento para quitarme el bóxer y dejarme en cueros, luego ella se fue quitando la camiseta, luego su top y por último la parte baja, quedó en cueros, ella se acercó e invirtió su posición, luego se montó para quedar en una perfecta 69, fue acercando su lindo y fino trasero, pude ver el circulo de su ano y su rajita rasurada, la tomé y comencé a lamer como un perro, primero su culito y luego bajaba a lamer los labios de su rajita, mientras ella seguía embelesada comiéndose mi verga. Qué delicia de sexo oral, yo le devoro su rajita al grado que ella segrega bastante líquidos íntimos y me como su ano llenándolo de lamidas y puyando su ano. Eso hace que mi hijastra me regale uno de sus orgasmos, ella emite un largo quejido y yo no dejo de lamerle su clítoris, pero apenas ella termina, sigue lamiendo mi falo.

Luego ella se empieza a mover hacia adelante, se va colocando montada sobre mi verga, la toma con una mano y se deja caer sobre ella metiéndosela lentamente, siento como mi verga abre y recorre su cuquita que esta caliente y mojada, es lo máximo, luego ella se lo introduce casi todo, emite un quejido de nuevo y luego comienza a cabalgarme a la inversa, es decir tengo la vista de sus nalguitas y mi verga entre ellas metiéndose en su rajita, yo solo acaricio sus pies mientras ella me coge bien rico. Mueve sus caderas adelante y hacia atrás, mi verga que no es pequeña, desaparece totalmente en su cuquita. Estefany empieza a emitir fuertes gemidos, al parecer está por correrse otra vez, así que la tomo de la cintura y ayudo en el movimiento de sus caderas, ella voltea la cabeza y me dice casi inaudible que esto es rico. La chica se viene y su respiración ahora es profunda, como si estuviera ahogándose.

Se desmonta luego de su corrida y de nuevo mete en su boca mi verga, no importa que esta esté impregnada de nuestros líquidos íntimos. Yo ahora quiero ser más activo y le digo que se acueste, ella lo hace y me voy colocando encima de ella, tomo sus largas piernas para abrirlas y las pongo sobre mi tórax, pongo mi verga en su rajita y se la voy metiendo un poco para empezar a pistonearla, en las primeras, se la tengo hasta el fondo, ahora yo llevo el ritmo y cambio de lento a rápido y rápido a lento, me voy colocando encima de ella y nos besamos, es el beso más candente de todos, mi verga dentro de su delgado cuerpo moviéndose en su estrecha rajita. Que más se puede pedir.

Cuando ambos estábamos gimiendo de lo lindo, ambos a punto de llegar al clímax, ella me recordó que no podía correrme dentro de su rajita, así que luego de esperar que ella llegara primero y me metiera su uñitas en la espalda, yo gemí y saqué mi verga de su cuquita y me vine bañándola de mi leche su vientre y su estomago. Fue un polvazo!.

Luego nos acostamos, las caricias siguieron, hablamos de lo que nos deseábamos tanto, del riesgo, pero pronto Estefany se fue bajando besándome las tetillas, luego mi tórax y llegó de nuevo a mi verga aun con restos de semen y de sus propios jugos íntimos, ella comenzó a mamar mi verga todavía flácida, pero en pocos minutos ya estaba semi erecta, luego ella se montó y ella misma se la clavó en su vagina, luego comenzó a cabalgarme ahora de frente, mi verga aún no estaba en su dureza total, pero comenzamos besarnos rico y me puse a mamarle sus pezones, al poco rato mi verga estaba de nuevo de regreso, dura dentro de su cuquita, de nuevo ella me cabalgó duro provocándose una corrida y a los pocos minutos, cuando grité, saqué mi verga y eyaculé afuera. Un polvo rápido.

Mi esposa llegó contenta algunas horas después, nosotros estábamos en el restaurante tomando uan bebida para reponernos de nuestro encuentro sexual con Estefany, nos ´dijo emocionada de sus compras. Al siguiente día le di mi tarjeta a mi esposa para que se fuera de compras, ella estaba al borde de la locura, ya que es una compradora compulsiva, y de nuevo nos dejó.

Hicimos el amor en la habitación de Estefany, repetimos las posiciones del día anterior cogimos intensamente, me hizo eyacular en su boca, no tragó todo, pero si probó mi leche. Luego ella se puso en cuatro, yo me puse atrás y le comí sus compactas nalgas, luego divisé el aro de su culito y abriendo sus nalgas lo comencé a lamer y a chupar, ella pegaba de gritos, al parecer le daba placer, pero se ponía nerviosa. Después de eso la penetré al estilo perruno, la delgadez de su cintura y su trasero me hacia sujetarme muy bien y penetrarla hasta lo más profundo de su cuquita. Pero lo que quería era poseerla por detrás, le dije que quería tenerla toda, ella me dijo que si, puse mi verga en su ano y comencé a empujar, ella gimió, pero mi verga no pudo abrir su culito, era estrechito, ella me dijo que nunca lo había hecho por allí, le dije espera!, me fui jale una crema de mi esposa que me recordaba era a base de aceites, se lo unté en su ano y su periferia, luego lo hice con mi falo, y de nuevo me puse en posición y empecé a empujar, con mucha dificultad mi verga fue entrando en su recto, ante su gemidos que era de nerviosismo o bien de dolor, y estuve así durante diez minutos, hasta que por fin se la tuve la mitad adentro de su culito. Se la pistonee por un rato y no lograba entrar más que la mitad de mi verga, a ella ya le empezaba gustar, yo le besaba la espalda y lo apretaba los senos, por fin logré correrme y lo hice dentro de su recto. Luego nos besamos y ella me dijo que la próxima vez estaría mejor.

Pero lo más intenso fue en la playa, estábamos dentro del mar y me dijo que quería hacerlo alli mismo, yo le dije que habían personas cerca, me dijo que se engancharía en mi cintura y que nadie se daría cuenta, la cargué, ella se enganchó y haciendo su bikini a un lado mi verga la penetró, estuvimos asi un rato, nos movían las olas, el agua llegaba un poco más alto que mi vientre, ló único que no pensamos fue que de la excitación eyaculé en su vagina un poco antes de sacarla, eso nos trajo pendiente días después, hasta que le vino su periodo.

Desde ese viaje, mi hijastra y yo lo hacemos frecuentemente, y no hay cuando acabar esta relación, cada vez es mejor.

Anónimo