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martes, 20 de diciembre de 2022

¡Cuarentena en casa con mi hija!


Ya pasaron seis meses que estamos en cuarentena, tuvimos una parte muy cruda que ya termino y ahora se están abriendo los comercios y lugares públicos. En todo este tiempo vi a mi hija hacer tik toks y cosas varias para no aburrirnos. La vi bailar, la vi actuar, la vi haciendo gimnasia y en cada cosa que ella hacía, yo la miraba con la máxima ternura que se puede despedir de mi cuerpo. Me gusta verla así, y me gustaría que uds vieran su sonrisa, combinada con su larga cabellera castaña, que le llega hasta la cintura, cuando se balancea, y su peinado hace el vaivén. Les juro que podrían dejar de hacer lo que estén haciendo para deleitarse de cada captura de movimiento de ese momento.


Por gracia divina, ella salió pegota a mi. Me abraza y se me cuelga por la espalda y cada vez que lo hace larga una carcajada de felicidad, y eso provoca que mis glándulas generen hormonas que me erizan la piel y me dan descargas eléctricas por todo el cuerpo.

Ya ver netflix se volvió un hábito, es de las pocas cosas gratificantes que se podía hacer, dentro de la normalidad… pero fue todo normal hasta que una noche no lo fue.

La principal prioridad de la tarde era con que acompañábamos a las palomitas, si con sal o con azúcar. La película era lo de menos, es más, ni ahora recuerdo cuál era. Pero en un momento dado, al pasar poco más de la hora de reproducción, ella de estar apoyada en mi hombro, poco a poco se fue quedando dormida y se fue cayendo hacia mi regazo, dejando su cabeza sobre uno mi pierna derecha. Todos hemos visto porno en donde EL MACHO saca la verga y se la mete en la boca durmiente y esta no se despierta y puede follársela rico y todas esas imágenes se me vinieron a la cabeza.

¿Que pasaría si esta fuese una de esas escenas?

¿Podría follarle la boca hasta acabarle dentro?

¿Seguiría dormida o se despertaría?

Si se despierta ¿Continuaría o se echaría para atrás?

Como primera medida, puse mi mano izquierda sobre su cintura y espere a ver que es lo que sucedia… Nada sucedio. Asi que retire la manta y comence a admirarle su cuerpo de pies a cabeza. Blanquita,  suave, juvenil, lampiña, chiquitita, fresca, pura, virgen. Hice un segundo movimiento, levante mi mano de su cintura y la lleve a su cadera para hacer un tercer movimiento y deslizarme por su curva hasta llegar a su cola y pasar de una nalga a la otra surfeando por la raya de su cola, y volviendo una y otra vez haciendo el mismo recorrido su viendo y bajando por ese risco que separaba su cachetes. Mi corazon explotaba a mil pero lo que mas explotaba era mi paquete que estaba debajo del short, y que muy pronto estaría tan erguido que levantaría la cabeza de mi nena.

Estuve un rato asi, no se cuanto tiempo, pudieron haber sido 4 minutos o 40 minutos que no hubiese notado la diferencia. Tome la decisión de aventurarme debajo de su ropa y cuando toque su ropa interior y sentí la suavidad de esa braga, se despidió una fuerte cantidad de saliva en mi boca, en respuesta del mega estimulo sexual erótico recibido. Mi respiración estaba igual de agitada que todas mi hormonas, pero mas aun se alteraron cuando ella se acostó totalmente boca abajo, con mi mano siguiendo debajo de su pantalón. Pase de sobar su linda piel a agarrar un pedazo de carne fresca. Se la agarraba con hambre, con necesidad.

Ya con los limites desdibujados, seguí avanzando sobre el terreno virgen y levante su pantaleta y toque su culo con total libertad, metiendo un dedo alrededor de su ano, sentir ese orificio y si me esforzaba un poco mas, también estaban sus labio… los de la boca, no los labios que dan a la puerta del paraíso. Y allí estaban, suaves y tiernos como todos los demás. Metia y sacaba un dedo, quite toda mi mano del lugar y me la empece a llevarla a mi olfato, queria saborearla, lamerla, degustarla. Y hubo un tercer momento que lo marco el cambio de ritmo… se acomodo y note claramente como levanto un poco mas su culito, invitándome a volver a entrar allí. Y ESO HICE. 

Dirigí mi mano izquierda con total convicción, sin resguardo. Y fue correcta la decisión, porque su respiración empezó a agitarse, ya no estaba dormida, simulaba estarlo y su respiración la delato. Al meter nuevamente mi mano, sentí mayor humedad, tenia su  chochito lubricado naturalmente. Así que la dedié firmemente y ella empezó a gemir en susurros (CONFIRMADO, LO ESTABA DISFRUTANDO). La tocaba y mi dedo entraba y ella acompañaba el movimiento y mientras mi mano izquierda hacia su trabajo, con la derecha tome una de sus manos, desde su muñeca, para llevársela sobre mi verga y empezar a sobarla y apretarla.

Y decidi ir mas alla. La tome con mis manos, la sente en el sofa, ella me miró, y nos fundimos en un beso apasionado. No sabia si este era su primer beso, asi que la lleve con cuidado. Le daba besos y la acaricie una mejilla, le tome la boca y se la abri un poco ayudado con la lengua, mientras un plano mas abajo, siguia con su mano, sobandome la verga. La segui besamdo y me saque la verga fuera del short. Y cuando ella detecto que estaba tocando algo carnoso y caliente se exaltó, pero no deje que la vea e hice que se concentre en el beso. Me empece a masturbar con su mano, con su pequeña mano.

Todo lo que estaba sucediendo excedía mi capacidad receptiva. Me desbordaba.

Ya con mi short y boxer bajos, la sente encima mio, con las piernas abiertas. Le quite su blusa y empece a besarle el cuello. Le dije que la amaba y que era mi niña, la niña mas hermosa del mundo. Sus ojos brillaron. La eche para atras y le bese esos pechitos en formacion que estaban en el punto justo, en el punto mas jugoso que un hombre podia pedir. No podia detenerme a pensar. Volvi a decirle que la amaba mucho y que tenia que sentirse especial. Y como si fuera una bebe, la manipule de tal forma que le quite su pantaloncito y su braga y quedamos los dos totalmente desnudos, sintiendo piel con piel. Ella estaba contenta, estabamos pasando un momento muy agradable entre nosotros y mi verga estaba entre sus piernas, sosteniendola.

Le dije que ibamos a hacer algo mas, y ella no supo a que me referia, asi que no me respondio nada y coloque mi verga, erguida, dura, totalmente dura (como la deben tener ustedes ahora) y empece a empujarla hacia abajo, mientras mi pelvis hacia fuerza hacia arriba.

Sus fluiditos mojaban la cabeza de mi verga, y los fluidos de mi verga lubricaban su entrada. Fui muy cuidadoso y suave, es mi hija y quiero protegerla. Así que de baja intensidad pero muchos fueron los empujones para que mi verga por fin entrara, o por lo menos la cabeza y cuando entró por fin, ella me abrazo rodeándome con todo su cuerpo, y lentamente fue cayendo centímetro a centímetro, y yo la levantaba un poco y la dejaba caer lentamente para que sienta, dentro de ella, la verga de papá y como nos estábamos vinculando.

Yo jadeaba… y ella airosamente expulsaba gemidos de su cuerpo.

Le limpie la transpiración de su frente y seguí penetrándola suave pero firmemente. Decidí cambiar de posición, ahora, le deposite boca arriba sobre el sofá, y empece a ejercerle yo la fuerza de penetración. Tome ambas manos, y las puse entre su vagina y mi verga, para que la sienta como entra, por supuesto aun no entra entera, pero en cada, su conchita tragaba mas y mas. Y así como aumentaba lo que tragaba, yo aumentaba la velocidad de la cojida.

Llego el punto que me la cojía como si fuese una mujer adulta… pero con un cuerpo diminuto. Ese, podía ser el momento en el que el mundo se acabase, que por mi estaba bien. Seguí sobándole sus pechitos, le acariciaba el pelo, mientras me la seguí penetrando ahora ya que le entre toda, quería que todo mi ser este dentro de ella y quien sabe, quizás también plantarle mi semilla.

Si, eso es lo que quiero. Si, eso es lo que voy a hacer.

Quiero acabarle, quiero acabarle dentro y quiero acabarle adentro como yo quiero. La puse en cuatro patas y volví a meterle la verga dentro. La cogía como perrito y es la posición que más disfruto. Sentía como su cuerpo hacía ruido en cada embestida. Amo ese sonido. Y se empezó a cargar mi barra de vitalidad. Ya estaba cerca. Ya casi, aquí está… y largos fueron los chorros de semen que le deposite dentro. Estoy seguro de que le llené su cavidad interna. Largos los chorros y largo fue mi grito de descarga…

AAAAAHHHHHhhhhhh que rico… te amo mi vida, te amo mucho, mucho.

Estuvimos unidos un rato, hasta recuperar la respiración. Ella no hacía nada, solo inspiraba y espiraba y movía los ojitos de un lado a otro, mirándome a mí y luego al techo, a mí, y luego al techo. Es más, se llevó un dedo pulgar a la boca jaja. Me la cogí tan fuerte, que volvió a ser una bebé.

Cuando le quite la verga, su hoyito expulso el sobrante de semen. Mis chorros le caían por ambas piernitas.

–Es hora de bañarnos– le dije.

No se si me entendió, pero solo hizo una mueca con la mirada, jajaja como me hace reir que solo pueda hacer eso. Sip, creo que hice un buen trabajo.

La tomé en brazos, cual a un bebe y desaparecimos tras la puerta del baño. El ruido de la ducha termino de silenciar nuestra agitada respiración.

Por L'Cherto

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