Si leyeron mi anterior capitulo Marien es una lolita de 15 años que dos viejos asquerosos lograron engañar por ingenua y seduciéndola por 100 duros o euros los cuales la chiquilla se ganó y bien; perdiendo su virginidad y saboreando lechita caliente por primera vez. Ella es una adolescente preciosa de castaña melena larga lisa y ojos color miel, un cuerpo juvenil que apunta formas armoniosas, alta, esbelta, como un junco, sus pechitos empezaban a florecer redondos, y su culito respingón al pegarse alguna prenda entre las nalgas marcaba más aún ese hermoso culo. La nena era una verdadera obra de arte la cual los hombres se dan vuelta para mirarla.
Después de este suceso en esa vieja casa con los dos alcahuetes de Vicente y Eusebio, Marien llego a casa a las 22 hs en punto evitando el regaño de su madre y dejando las puertas abiertas para nuevas salidas. Su madre la veía con una chiquilla todavía muy infantil y nada despierta por eso le repetía hasta el cansancio la frase que cuando estás sola en la calle “No hables con extraños” cosa que nuestra heroína no hizo el menor caso y termino embarrada con el espeso liquido blanco y toda pegajosa de los lechazos de los dos viejos y la tremenda cogida que le propiciaron.
La madre la ve entrar y subir directo a su habitación no quería que la viera ni que oliera el aroma que traía, ya que entre las revolcadas en ese viejo colchón y la leche que le quedo pegada en la piel y su ropa arrugada parecía una resaca de un día de juerga; se impregno de un aroma fétido, nada agradable.
– ¿La madre desde la cocina, amor quieres cenar algo?
-Marien: ¡¡no gracias!!, estoy muy cansada caminamos mucho con Vero y Pilar comimos unos bocadillos me quiero bañar y de paso leo algo del cole para mañana, gracias mami.
Aprovecho se sacó la ropa la dejo debajo de la cama para meterla directo al lavarropas a primera hora de la mañana así su madre ni se daría cuenta y se dirigió directo al baño. Mientras se bañaba y pasaba jabón por todo su cuerpo su cabecita daba vueltas pensando todo lo que le había pasado ese día; por un lado, se sintió sucia cuando recordaba todo lo que le había pasado. Por otro lado, mientras en su cabeza pasaban todas las escenas sentía que le picaba su coñito y eso si le gustaba, la hacía sentir mujer. Recordaba como esos dos viejos la habían seducido y como se habían portado, Eusebio era un gordo asqueroso no la había tratado bien; pero Vicente sí; era dulce y amable si bien no era un adonis de hombre, pero le había gustado chupar su polla, saborear sus jugos y la rica cogida que recibió de él. “!Hummm”!, Vicente me había caído bien y pude ganar euros/duros 100 lo cual hizo que borrara lo que paso en esa casa y que dibujara una sonrisa pensando las cosas que se compraría”. Sin pensar que en el momento que acepto el trato con esos maduros la dulce y tierna Marien ya era toda una puta cobrando su primer empalmada con esos dos hombres y sembrando una semilla que muy pronto daría sus frutos siendo saboreada por nuevos amigos de Vicente.
Se termino de bañar se secó bien con una toalla se envolvió en una bata y otra toalla para anudar el cabello, se tumbó sobre la cama encendió el velador y desde que estaba en la ducha y salió de ella esos pensamientos la perseguían. Desde cuándo empezó a sobar las pollas a Vicente y Eusebio, el dolor al penetrarla ese gordo asqueroso, hasta lo rico de mamarle esa verga de buen tamaño a Vicente. Enseguida empezó a subirle un calor desde el coño hasta esos dos pechitos hermosos, más la calentó cuando recordó la lengua de Vicente en su coño ahí empezó a sentir los jugos que venían. Arrancó acariciando con los dedos el clítoris y comenzó a jugar metiendo dos dedos en esa cuevita rosadita, cubierta solamente con una pequeña mata de pelos y con la otra mano masajeando los pezones, sintió que rico se venía y acelero el trámite con sus dedos en forma compulsiva, formo un arco con su espalda, quedando en posición fetal recostada sobre un lado de su cuerpo, apretando las piernas hasta que exploto en un orgasmo y enseguida se le vino a la cabeza las dos vergas que había recibido en la tarde y la leche que había tomado tratando de recordar ese gusto salado pensando que no había estado tan mal. Su cabeza era un ida y vuelta por un lado se sentía excitada de haber sido su primera cogida y sin tanta experiencia y recordando esas charlas con Verónica, donde soñaban con tener sexo y como seria su primera vez, no le había ido tan mal y había ganado un dinerillo que sus padres ni en un año le habrían dado.
Llego a su cabecita la última frase de Vicente antes de llevarla de nuevo a su casa.:
“Toma, esto es tuyo”, ¡cuando quieras, te podemos dar más, solo se trata de jugar algunas veces más. Verás (sonrió afablemente) será muy divertido, porque jugarás con más amigos y te ganarás más dinero, porque todos te darán. ¡Tú dirás!, así había sido su despedida.
PRESENTEMOS A CADA PERSONAJE DE ESTA HISTORIA, ASI LOS VAIS CONOCIENDO, LAS NIÑAS AMIGAS DE MARIEN, VERONICA Y PILAR, EL JEFE DON PEDRO Y TODO LO QUE VENDRA QUEDARA GIRANDO ALREDEDOR DE ELLOS.
En esta segunda parte os quiero poner en contexto para que conozcan cada uno de los personajes que nos va a llevar a conocer los vicios, deseo carnales de nuestras ninfas adolescentes y su gusto por las pollas maduras, cada una arrastrara su deseo por estos viejos rabos verdes.
Para entrar más en trama les describo una sociedad entrando en los años noventa en España donde la pornografía era VHS con mucha suerte y revistas que llegaban de países vecinos.
Las amigas de Marien:
Las dos amigas de Marien, son Verónica y Pilar las tres son de Lorca, se conocen desde los dos años cuando comenzaron juntas el ciclo infantil hasta los 6 años, después el primario y al final con la secundaria donde cursan el bachillerato en el Municipio de Lorca perteneciente a Murcia. Las tres son de clase media no de grandes lujos sus familias, pero sin pasar sobresaltos de dinero manteniendo ciertas comodidades sin hacer ostentaciones. La vida de las chicas se pasó entre pijamadas, suspirar por algún compañerito, sus primeros besos y amores sin corresponder. Grandes charlas de sexo un poco cohibidas y sin grandes experiencias y algún descubrimiento entre ellas sin pasar a mayores como aprender a besar y contarse intimidades de lo que podían descubrir a escondidas espiando a sus padres, hermanos, familia. Pilar era un poco más recatada, para el gusto de las niñas más santurrona, los domingos a misa con sus progenitores y asistir a la beneficencia alguna vez en la semana. Era muy buena deportista, excelente nadadora por lo cual poseía un culo envidiado por sus dos amigas y compañeritas, una verdadera obra de arte, muy marcado y respingado unas piernas bien torneadas unas tetitas chiquitas pero hermosas punteando bien sus pezones cuando salía del agua después de hacer sus ejercicios de natación y para suerte de algún padre o profesor; veían en forma apetecible como se le metía la lycra entre esos cachetes del culo y se le marcara bien los labios del coñito. De carita con muchas pecas, piel blanca pelo negro cortado a lo carre, de una estatura media de su edad, pero de un físico fibroso, todavía en desarrollo prometiendo ser una hembra hermosa. Verónica en cambio de madre húngara y padre esloveno era una hermosa hembrita pelo largo y rubio hasta la cintura una piel tersa y blanca muy blanca, unas piernas largas y torneadas una cintura pequeña un hermoso y pequeño culo bien parado donde cualquier pantalón o pollera se lo hacía resaltar, haciendo que nadie dejara de mirarla sobre todo esos viejos verdes que más de una paja le dedicaron. Sus tetitas eran apetecibles sin tener los senos desarrollados era una belleza mirar esos pechitos que ya se pronunciaban como dos globos perfectos, resaltaban unos ojos azules como dos platos y esa carita de lolita angelical. Verónica era unos meses menor a Pilar y Marien tenía 14 años todavía, pero la más alta de las tres. Las amigas si bien eran adolescentes todavía eran muy bebas estaban a punto de caramelo porque conservaban esa inocencia e incredulidad sin ninguna malicia, caso contrario a lo que le paso a Marien que despertó de la inocencia después de estar con esos rabos verdes que la desvirgaron.
Las que más se confesaban historias eran Marien y Verónica, esta última heredo de su madre ese fuego de las mujeres húngaras y el gusto por el sexo que inconscientemente reprimía, también por la falta de experiencia a esa edad. Con Marien ensayaban besarse, juego que fueron transformando y experimentando al usar sus lenguas. Así decían las niñas practicaban para cuando estén con chicos, nunca paso a mayores, pero hacía que se calentaran y mojaran sus bragas. Las dos eran muy compinches si bien amaban también a Pilar muchas veces no la participaban de sus largos parloteos sobre varones y de sexo por miedo que compartiera los secretos contándole a sus padres.
Las niñas tenían un conocimiento de sexo muy limitado, habían visto alguna polla en vivo de algún hombre en público descargando sus orines, o de algún degenerado voyerista en la calle. Nuestras jóvenes eran muy bonitas y llamativas predominando esos culos hermosos con que fueron agraciadas. Así que a medida que fueron creciendo se daban cuenta de los arrimones de las que eran victimas en el colegio o en autobús, sobre todo de estos viejos sinvergüenzas que se aprovechan de las estudiantes. Las muy putitas aprendieron a tomarle el gusto y se dejaban apoyar para sentir las pollas en el trasero, les llamaba la atención y le producían un cosquilleó hasta orinarse sin saber que eran pequeños orgasmos, de la gran movida de hormonas típica de su edad. Para ellas pasaba a ser un juego, encontrarse a la mañana y contar lo sucedido en el viaje hacia el colegio, todo en un tono de risa y picardía.
Don Pedro Diaz, el “jefe”.
Don Pedro era un hombre de unos 75 años el tiempo le había dejado como recuerdo una calvicie no prominente, pero de esa larga melena de su juventud solo quedaban algunos largos y sebosos cabellos intentando disimular a buen peine su casi calva cabeza, medía 1,85 metros, barriga prominente gracias a los alcoholes de todas las marcas y tipos, comilonas y parrandas. Una gran mata de pelos cubría su pecho y espalda y sus piernas arqueadas por el paso del tiempo y su poderoso instrumento una gran polla de 19 cms la cual libro muchas batallas entre putas de burdeles y niñas entregadas por sus padres a cambio de unos buenos duros de su época hoy euros. Estas últimas eran su debilidad sobre todo las rubiecitas era tanta la excitación que le provocaban estas ninfas que su cuerpo temblaba de solo verlas y le provocaba tal erección que no se podía ocultar con tremenda polla. Por la mañana era un rito juntarse a tomar café acompañado con un coñac, con su amigo y empleado Vicente sobre una esquina, sitio estratégico muy cerca de un colegio católico donde podía disfrutar y contemplar el desfile de todas esas bellezas con sus uniformes azules muy de instituto cristiano. Mientras las jovencitas circulaban sobaba su instrumento sin ningún tipo de recato cosa que algunas niñas le causaba risitas y a otras repulsiones por estos dos viejos. Don Pedro es un hombre importante en la comunidad de Lorca era poseedor de una de las más prestigiosas empresas constructoras y dueño de un centro comercial en pleno centro de la ciudad. Se había abierto paso en la vida desde muy joven, su padre era un oficial de bajo rango prestando servicio en (Marruecos) y transferido a Melilla y Ceuta esta última donde nació no llegando a conocer a su madre ella murió después del parto, criado por parientes y que una u otra madrasta, viviendo de un lado al otro no teniendo una infancia muy feliz todo fue duro para este joven. Hasta el ingreso a la academia militar saliendo con el grado de Alférez. Comenzó en Murcia, con los años y experiencia le propusieron negocios en el mercado negro fue ganando sumas importantes de dinero, vendiendo armas y todo lo que fuese redituable. Ya a los 45 años había amasado una buena fortuna, es donde fue sumariado en la milicia por irregularidades, dado de baja como Capitán. Pero gracias a sus contactos dentro y fuera del ejercito hicieron que quedara todo en silencio y en una baja honrosa, sin hacer mella en su persona. Ya como civil comenzó sus negocios en la construcción, diversificando en juegos de azar, propiedades, burdeles y lavando dinero para otros. Se fue convirtiendo en un personaje importante dentro de la comunidad, teniendo trato con políticos y gente acomodada dentro de la sociedad de la época. Tampoco le falto conocer algún malandra dentro de zonas más bajas y humildes de la ciudad, relaciones que le habían quedado de su época de militar. Su amigo Vicente siempre le había servido desde la época de la milicia, había estado con Don Pedro como su asistente con un grado de sargento primero al retirarse, el pidió la baja cuando su jefe y amigo lo expulsan del ejército. A los dos le fueron pasando los años, nunca se unieron a ninguna mujer, solo existían las putas y corretear a menores su mayor distracción. Vicente siempre fue el encargado de traerle las putitas más chicas, ya que conocía el gusto de su jefe.
Ya presentados los personajes seguimos con la trama y acción.
Pasaron los días y Vicente no se podía sacar de la cabeza a Marien y enseguida pensó en su jefe Don Pedro como podría saborear a esa chiquilla y cogerla hasta el cansancio. Antes de hablar con Don Pedro decidido hacerle inteligencia a Marien, la había dejado cerca de la casa y se había asegurado donde había ingresado, sabía que estudiaba en la secundaria y a la mañana o a la tarde debería salir así que estaciono el auto a una distancia prudencial, un lugar donde no levantar sospechas para sacar algunas fotos, ver sus horarios y mostrárselas al jefe a ver si le era de su agrado. Había pasado un mes del encuentro con esos dos rabos verdes y Marien fue volviendo a la normalidad después de lo ocurrido, pero ya había picado al aceptar la pasta y la presa una vez que prueba carne es más fácil atraparla, eso pensaba la mente perversa de Vicente. Así que dedico dos semanas a ver los horarios de entrada y salida del colegio saco varias fotos con la ropa de Colegio, siempre la veía con sus dos amigas Verónica y Pilar teniendo todo preparado para que Don Pedro pudiera apreciar su nueva putita al caer. Vicente era un hombre de paciencia y debería esperar el momento justo para abordarla y volver a engañarla nuevamente, esto debería ser muy discreto no debería estar ni cerca de la casa ni tener tanta gente alrededor.
Después de una larga vigilia munido de paciencia ese día llego, las chicas tenían deportes y se retiraban bastante más tarde del colegio; las tres se despidieron y marcharon cada una por su lado. Marien caminaba dos cuadras, cruzaba en diagonal la plaza frente a la iglesia y se dirigía a la parada del autobús que la llevaba a su casa, ese era el momento justo que nadie sospecharía, no quería dar ninguna explicación por si aparecía algún guardia civil, también podía haber personas que lo conocieran ya que su jefe era un personaje importante de la ciudad. Ese era el día, dejo el auto en un lugar cercano a la plaza a dos cuadras y espero que Marien saliera caminando y ya su cabeza había calculado donde atravesarla para no provocar sospechas. Así fue que estando cerca menos de 15 metros, Marien pudo divisar a Vicente, se venía de frente a ella. A estas alturas su corazoncito latía más rápido a punto de explotar, su carita estaba roja y su cuerpo recibiendo toda la adrenalina comenzó a transpirar como si hubiera salido de una ducha. Ni lento ni perezoso cuando estaba menos de un metro, Vicente como si fuera un conocido de años le dedicó una sonrisa:
Vicente: ¡Hola Marien como estas mi niña! “Pensando nos volvemos a ver las caras mi putita hermosa” y se acercó y le planto un beso en la mejilla como si familiar fuera sin levantar sospechas.
Marien: ¡Hola Señor Vicente como está Usted!
Vicente: ¡Muy bien linda! ¿vuelves para tu casa a esta hora me imagino.?
Marien: ¡Si, si!
Permaneciendo inmóvil y con una cara de susto habiendo quedado su rostro blanco, como quien ve un fantasma.
Vicente: Vamos que te acerco tengo el auto aquí cerca, caminemos le señaló con total naturalidad.
Merien, “! ¡Rumió!, ¡otra vez lo estoy haciendo, repasó internamente!”, pero no esta vez no va a pasar! Aunque el Sr. Vicente sea tan amable y muy dulce conmigo. La idea la tranquilizaba un poco o por lo menos, eso creía ella. Los pensamientos iban y venían y cada vez la confundían más.”
Esa cuadra y media parecía una eternidad no platicaron mucho, cruzaron alguna sonrisa tímida por parte de los dos, pero Vicente ya estaba haciendo su trabajo muy bien y la nena no estaba oponiendo mucha resistencia pensaba para adentro, se relamía con esa figurita y repasaba serás la putita de mi jefe y te voy a enseñar a comer pollas con ese culito sin estrenar. De solo pensarlo y la ingenuidad de Merien, le provocaba una tremenda erección, cuestión que la nena no se había dado cuenta. Cuando llegaron al auto, Vicente la acompaño como todo un caballero dio la vuelta le abrió la puerta solo para volver a mirar ese culito respingón y al subir esas hermosas piernas, buscando una posición para acomodarse en el asiento se le notaron aún más, aprovecho el momento al subir para tocarle los muslos y nena sintió algo de electricidad, esbozando una ligera sonrisa de timidez. “Vicente pensó, ya cayo de nuevo en el juego, pero ahora dentro de poco nos vamos divertir más chiquita”.
Marien seguía un poco incomoda y se arrinconó sobre la puerta del acompañante como un perrito asustado esperando ser rescatado, Vicente no era tonto y contemplando la escena como la otra vez ganaría su confianza el solo pensamiento de lo que sucedió anteriormente lo tenía empalmado. El embaucar a la gente le gustaba, así lo formo su jefe es más fácil el engaño que el miedo, ganando la confianza del otro se obtiene menos resistencia, eran las palabras que a fuego le marco Don Pedro.
Ya dentro del auto:
Vicente: ¡” Marien pero que guapa estas” !, te queda muy bonita tu faldita y ¡”te vez radiante después de la última vez que nos vimos”! Dime niña comprasteis algo con el dinerillo que te ganaste, por cierto, en verdad estuviste como toda una mujer tu sí que sabes estar con un hombre.
Esas palabras como a toda mujer tocaron su ego y comenzó a levantar la barrera deponiendo una actitud de defensa que venía trayendo, logrando que se sienta más cómoda.
Marien: ¡” Gracias Don Vicente!”, Usted es siempre amable conmigo y ha sido generoso, no así su otro amigo ese gordo que es muy bruto.
La expresión de la niña fue con total desprecio y no lo podía disimular.
Vicente: No le des importancia si no quieres, no quieres, como te dije la primera vez tu eres toda una mujercita y nadie te obliga a nada de lo que tú no quieras hacer.
Marien: ¡Gracias Usted si me entiende!
Vicente:” Porque me llamas de Usted”! hemos estado juntos e besado esa boquita con gusto a fresa y ese cuerpazo hermoso jajjajajjajajjajajjajajajaj, “! llámame Vicente, mi niña!”.
Después de esas palabras los cachetes de la niña estaban rojos a explotar.
Marien: ¡” Bueno, ¡vale Don Vicente” !, perdón Vicente. Lo miro con una tímida sonrisita y con un dejo de picardía.
Vicente: Voy a detener el auto así charlamos tranquilos unos minutos estamos ya cerca de tu casa y no quiero que nos vean juntos, no es por mi sino por ti mi angelito no quiero que piensen cosas que no son. Me entiendes.
La niña asistió con la cabeza totalmente convencida de su protector, ese mensaje le daba seguridad. A cada palabra Vicente se empalmaba más y más, teniendo ese bombón al lado quería tirase arriba de esa incrédula lolita y gozarla hasta poder sacarse el, hasta la última gota de leche, pero se contuvo. Mantuvo su plan sin dejar de actuar cada palabra del guion que había madurado.
Vicente: ¡Ven Marien acércate un poco no te voy a comer!” jajjajjajajjajajjajajaja”!,
Con cierto recelo y sin pegarse se acercó al viejo degenerado, este le paso el brazo por encima del hombro y con los dedos de la mano izquierda le levanto la barbilla, esa es mi ¡!chica! Ya parecían dos enamorados era tan grotesco ver a este rabo verde con esta lolita que la situación comenzaba a ponerse caliente, ya que Marien se dejaba llevar.
Vicente aprovecho la oportunidad y se pegó a su lado mientras acariciaba el cabello con suavidad y con los mimos y arrumacos la nena se sentía cómoda y correspondida. Ella noto que su cuerpo le estaba jugando una mala pasada y sentía que todo se salía de control. Ya que su coñito, la estaba traicionando tenía las braguitas mojadas. Nuestro amigo seguía con su plan paso a paso.
Marien te apetece una paleta, si asistió la niña, abre la guantera y coje una, siempre llevo algún dulce ahí guardado.
La niña ya a esta altura no cerraba las piernas todo lo contrario se encontraba abriendo esos dos muslos tan apetecibles y disfrutando la ternura de las caricias y de las palabras de su amigo.
Marien: ¿Vicente dónde están?
Vicente: Ahí amor, dentro de esas revistas dobladas.
Marien extrae las revistas y ahí había dos paletas, pero las revistas eran de pornografía, a Marien le saltaron los ojos.
Marien: ¡Vicente! ¿que son estas revistas?
Vicente: Amor nunca habías visto una, échale una mirada. Las ven tanto hombres como mujeres, así aprenden las parejas a tener sexo, son muy instructivas ¡”Jejjejejjjjeeeee reía para adentro.”!
Marien: ¡No Vicente!, se por lo que hablamos con mis amigas, pero nunca vi una.
Vicente: ¡Pues miremos juntos te parece!
Ya a esta altura la nena se estaba encendiendo y ganando toda la confianza con su amigo.
Vicente: Ven amor recuéstate de espalda así estas más cómoda y sácale el papel a la paleta así la disfrutas. “Se imagina el viejo, de paso lubricas la boquita para lo que va a venir”.
La nena se tumbó toda despatarrada fascinada con la lectura por venir ya sin importarle mucho, apoyo su espalda contra el pecho de Vicente él le paso las manos por detrás y las junto con las de ella donde tenía la revista para comenzar a mirarla. Era un ejemplar de Dinamarca donde había muchas niñas con hombres maduros en distintas pociones según los cuadros que iban pasando. La chiquita no emitía sonido, se podía escuchar el corazón latir dentro del auto y la calentura que iba subiendo a medida que daba vueltas las hojas y veía mamar a estas niñas tremendos pollones, verlas posar en cuatro patas recibiendo pollas, quedo paralizada y extasiada. Vicente con mucha sutiliza, rozaba con una mano los pezones de la ninfa que a esta altura estaban muy duros y con la otra acariciaba sus piernas levantando la pollera con mucha suavidad, le nena en un momento cierras los ojos y lo deja hacer a gusto se imaginaba las poses en la revista y la calentura fue más fuerte. Vicente ya le había desabrochado la camisa escolar y jugaba con los pezones con suavidad, con la otra mano sobaba la braguita de corazoncitos purpura sobre los labios del coñito el cual manaba jugos, Vicente no soportaba más estaba a punto de estallar, la polla latía como si fuera una extensión del corazón. La niña totalmente entregada como buena putita se dejaba hacer, comenzó a besarle el cuello y la carita, la niña solo suspiraba y ante tal magreo ya estaba totalmente entregada, aprovecho en ese momento le giro la cara la trajo hacia él y comenzó a besarla primero piquitos después la invasiva lengua que la nena al principio negaba; pero era tal la calentura que empezó a retribuir los besos y ya era un ida y vuelta donde ambas lenguas se correspondían. Aprovechando el momento, Vicente le deposita la manita sobre la polla, “aaaahhhhhhhh, pero que mano calientita” la cual la nena la deja sin ningún problema y recordando lo acontecido anteriormente la soba cual juguete tuviera en su mano, Vicente se desabrocha la bragueta dejando la sublime polla al aire y totalmente parada sobre la mano de Marien, que lo comenzó a masturbar.
La pequeña manita de la nena comenzó a sudar, ya que entre su mano y la polla de Vicente se generó un calor infernal, sin embargo, la nena apretó con fuerza ese falo, como si no quisiera despegarse de él, con la otra mano llevó uno de sus dedos a su boca y mantenía un coqueto movimiento con este alrededor de sus carnosos y brillosos labios mientras con los ojos cerrados volvían las imágenes de la revista.
El empezó a chuparle las tetitas y esos pezones que a esa hora estaban muy duros recibiendo lengüetazos y pequeños mordiscos que eran para la criatura segundos de electricidad en el cuerpo, con la mano libre comenzó a dedear hurgueteando esa cuevita que pedía a gritos esos dedos que se claven para calmar tanta calentura. En ese momento la chiquilla no resistió más arqueo su cintura y de su tierna voz lanzo ¡Ay ayy ay ay ay mmmmmm ay ay ay!, gemía ¡hay hay hay hay! no puedo no puedo más que me pasa, hay ¡Vicente!, ¡Vicente! amor que me pasa, que me pasa, le tapó la boca introduciendo la lengua hasta la campanilla la cual la niña correspondió recibiendo y haciendo lo mismo, cruzando saliva los dos de boca a boca sin importar nada en eso Vicente acelero los dos dedos que tenía en la cuevita y Marien lanzo un suspiro seguido de tremendo orgasmo, estaba arqueada y suplicando, por más. “Vicente pensaba, en que hermosa putita se va a convertir como la va a gozar el jefe”. Marien quedo en total desorden y confusión sobre el asiento con las piernas abiertas y chorreando flujos de tal descomunal orgasmo que tuvo. Recostada sobre el regazo de Vicente sus ojitos quedaron en forma directa a la polla recordando esos momentos de su primera vez cuando la chupo y le gusto. Sin mediar palabra Vicente la agarro la cabecita y le llevo los labios al glande, la niña no opuso la menor resistencia y comenzó a mamar esa soberana polla que estaba parada a punto de reventar. La jovencita como toda una profesional mojo la cabeza del miembro con sus labios muy dulcemente y comenzó a comerse la polla, saboreaba con la lengüita los jugos salados preseminales, Vicente sentía esa lengüita hasta la uretra el placer que le provocaba no tenía comparación con nada, la nena a medida que avanzaba y tomaba mayor confianza se llevaba el tronco más y más a la boca, guiada por las expertas manos de su conquistador subía y bajaba con la cabecita ayudándose de las manos, pajeandolo. Le estaba cogiendo la boca a esa chiquilla y ella con gusto que lo hacía y disfrutaba a la vez, el sínico de Vicente le decía amor que bien lo haces eres toda una mujercita nadie me ha hecho gozar como tú. Esas palabras sacaron la hembra poderosa que llevaba Marien acelerando más el ritmo y disfrutando la gozada de su hombre llevando un estigma que nunca cambiaria el de sentirse una putita. Mientas le masajeaba los pezones la nena volvió a sentir esos calores y los jugos en su coñito empezaron a correr en un segundo Vicente se dio cuenta de esta situación. Le pego más de pompas hacia él y le metía los dedos en el coño y muy despacio le entraba el pulgar en ese culo hermoso el cual aún era virgen desde lo alto se podía ver la escena; Marien gozando de la tremenda mamada que le hacía a su hombre y como Vicente la manoseaba toda; la chiquilla ya no tenía ningún control de su cuerpo. Le aparto la mano del culo porque le molestaba, pero el viejo zorro aprovecho los jugos de Marien y ayudado de un buen escupitajo dejaron al dedo índice girar alrededor de ese hoyito hermoso que se veía rosadito y chiquito, las nalgas se podían apreciar bien duras la mocosa tenía una cintura y un culo hermosos, las manos de Vicente estaban en el paraíso. Comenzó con círculos y despacito a medida que la niña cedía se lo iba enterrando pero muy despacio esto provoco nuevas sensaciones que Marien estaba explorando, los dos de la calentura aceleraron los ritmos al unisonó, Marien se veía envuelta en un nuevo orgasmo, desesperada cerro las piernas con fuerza dejando los dedos de Vicente apretándoselos con fuerza, le tomo la mano para darle impulso como si la estuviera cogiendo, nuestro degenerado amigo no dudo y en el medio de tanta acción y desenfreno le enterró el dedo anular de esa huesuda mano con dedos muy largos hasta el fondo del culo de la chiquita convulsionaba de tanto placer se retorcía como una víbora moviendo la cadera y la pelvis de atrás hacia adelante quedando con la boca abierta de tanto goce, ¡!!!No puedo más!!!!, ahhhhhhhh,mmmmmmmm,Vicente,ahhhiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii,mevieneeeeeeeeeeeeeeeeeeee,me vinennnenenenenene, hermoso, ahhhh!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! sintió otro tremendo orgasmo nuestra lolita. Ante tanta agitación Vicente sintió que ahora le tocaba venirse a él ya no podía resistir más , con una mano agarro la cabeza de la nena y con la otra dirigía la polla directo a la boca haciendo tremenda paja sobre los labios no paraba de salir leche, le bombeaba esa leche espesa y caliente, la nena intuitivamente comenzó a tragar toda la leche sin dejar de mamarle la polla, no dejo escapar ningún líquido y disfrutando con cada lengüetazo que le daba, lamiendo el glande hasta que se fue reduciendo en la boca. El auto olía a sexo por los fluidos, leche de Vicente y Marien que había dejado el tapizado mojado de orines y liquido vaginal. Los dos se acomodaron Marien se encontraba en otro mundo se sentía deseada como mujer y sabia ahora lo que era gozar con un hombre, pero también era una chiquilla y ahí le surgía la confusión, pero para sus adentros pensó ya está hecho no tengo vuelta atrás.
Una vez acomodados y calmados de tanta adrenalina y sexo por parte de los dos Vicente la adula un poco, charlan de lo que paso y como se sentían. Aprovecha le da un pequeño beso en los labios y con mucha sutileza le explica.
Vicente: Amor recuerdas que cuando nos despedimos te comenté que si querías ganar un dinero extra tengo amigos que pagarían, bueno tengo un amigo que además es mi jefe para el trabajo él es un señor mayor es elegante y muy educado, no harías nada de lo que no te guste hacer, además solo estaremos los tres. Te vas a divertir y jugaremos juegos de grandes como el de la revista que vistes ya eres una mujercita hermosa, los chicos de tu edad no saben contemplar la belleza que eres y tampoco te hacen sentir lo que sentimos hoy. Puedes ganar una buena pasta y si le caes bien nada te faltara, después me estarías ayudando a quedar bien con él.
Marien se quedó pensativa todavía no terminaba de comprender lo que le había pasado hace un mes, ahora esto con Vicente en el auto y una nueva propuesta, era algo difícil de digerir en la cabecita de nena de 15 años.
Vicente: ¡Mira piénsalo tranquila! ¡piensa en las cosas que podrás comprar con el dinero que ganes!, además de lo bien que la vas a pasar, lo piensas y me llamas a este número que es el mío particular, estoy a la mañana temprano o al mediodía cuando salgas del cole o la noche si puedes me llamas, vale. Mira Marien igual tomes la decisión que tomes eres mi gran amor siento que si no estoy contigo el mundo no existe. Marien lo miro con ojitos tiernos y se abalanzo y lo beso y le dio un gracias, a mí me caes muy bien también Vicente.
Vicente no podía creer lo fácil que resulto engatusar a esta niña se sentía totalmente satisfecho, bueno para algo le sirvió estar al lado de Don Pedro era el mejor en el arte del engaño.
Se puso en marcha el auto hicieron unas cuadras antes de llegar a la casa de Marien, Vicente metió la mano en el bolsillo saco 50 euros/duros y se los dio, Marien no entendía mucho lo que pasaba, pero por instinto los tomo sin parpadear. Fue una escena muda, bajo con sigilo del auto camino dos cuadras viendo que nadie la veía llegar y se dirigió a su cuarto sin hacer ruido como un fantasma. La madre (Lucia) no estaba había salido de compras con los dos hermanos de Marien, Fernando de 4 años y Catalina (Catita) de 10 años.
Continuara
Por ESCRITORJON
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