jueves, 19 de enero de 2023

Desvirgando culitos


Hola. Soy Carlos, y hoy les contaré cómo le desvirgué el culo a mi sobrina. Tengo 43, casado, hijos, esposa, etc. Vamos, que soy un tipo normal. Pelo cano, barba, algunos kilos de más y un pene normalito, no de actor porno pero de la media.

Bueno, todo empezó hace algunas semanas en que mi esposa andaba en trámites laborales y con un estrés de puta madre, lo que derivaba en que nuestros encuentros sexuales fueran casi nulos, sin contar que además teníamos casa llena, porque mi cuñada desempleada pasaba su mal momento en nuestra casa con sus hijas, Martina una adolescente de secundaria (13) y Elena dos años menor.


Separada hace casi una década ha tenido que batallar sola por sus niñas y ahora estaba en desgracia por lo que se pasaba entre la casa de mi suegra y la nuestra mientras mejoraba su situación.

Volviendo: Esas semanas andaba yo muy alzado y con ganas de darle a lo que me diera chance, y ahí es donde sucede el milagro.

Quise salir a correr un rato para liberar tensiones y recrear la vista mientras me ejercitaba, en unas que pasó por una plaza y veo a mi sobrina Martina apoyada en un árbol besándose y acariciándose con un muchacho de unos 20 con pinta de reguetonero o delincuente, ella con su Jumper de colegio y en horarios en que debería estar en clases, claramente se había saltado el colegio. ¿Así que sin dudarlo me les dejé caer preguntando cómo iban las clases?

¿Ambos al verme fue como si hubieran visto al diablo, aunque él quiso agrandarse y desafiarme preguntando qué honda? Lo agarré de la camiseta, lo sarandié y le dije que desapareciera, lo que ahora sí, hizo raudo.

Yo.- ¿Martina, que significa esto? ¿No se supone debes estar en clases?

M.- si tío perdone, pero es que, perdón, no sabía que me iban a ver y fue mi primera vez, porfa no le diga a mi mamá porque me va a pegar.

Yo.- ¿Pero como se te ocurre? ¿Además, con un tipo así? ¿Por qué siempre eligen a los peores?

M.- dale tío, lo conozco de hace poco y me insistió… Y no hacíamos nada.

Yo.- ¿nada? ¡Te estaba manoseando!!! Y tú a él… Te vi sobándole el paquete.

M.- tiiiooo… Ya, pues no diga nada… Me van a pegaaarrr – decía como lloriqueando.

Vas a tener que hacer mucho mérito conmigo Martina, vámonos a la casa, Y ella cabeza gacha, me siguió de vuelta.

La verdad es que ver a mi sobrinita sobajeándose con el tipo me puso bien caliente, más considerando lo faltó de sexo que andaba y para que decir, mi sobrinita estaba bien rica y con su Jumper se veía aún más rica, su culo paradito, cintura estrecha y tetitas a medio desarrollo que por el ritmo que crecían se notaba que sería tetona como su madre y su tía.

Al llegar a casa se encerró en el baño a llorar y a ratos me pedía que no dijera nada a su madre, entonces la llamé a la sala y le pedí que se sentará a mi lado.

Yo.- dime, hace cuanto conoces a ese tipo, de dónde es y cuántos años tiene.

M.- lo conocí hace una semana, ni siquiera sé dónde vive y me dijo que tenía 20.

Yo- ¿20? Y qué onda te gustan mayores? ¿Por qué no te juntas o sales con alguien de tu curso o de tu edad?

M. Porque son tontos, piensan en juegos, fútbol y otras tonteras y yo quiero experimentar, quiero vivir, aprender… Hay tío tú no entiendes

Yo ya tenía la verga morcillona de solo escucharla, que quería guerra y estaba dispuesto a dársela.

Yo.- pero un tipo así no te va a cuidar, mírate… Los sorprendí en medio del parque, a vista de todos. ¿Crees tú qué si te embaraza se hará responsable por ti? Y bajando la cabeza me contesta no.
Pero en un ataque de querer responder a mi verdad me dice.

M- además no lo iba a dejar llegar tan lejos como para embarazarme

Yo- ¿ya y como lo ibas a evitar? ¿Tomas pastillas? ¿Preservativos…? ¿Tenía?

M- no …no creo.

Yo- ¿Entonces???

M- dicen mis compañeras que por la colita no se embaraza y además no dejaría de ser virgen…

Ya con eso se me terminó de parar el pene y le digo – tu madre debe saber esto…

M- noooo tío, por favor, por lo que más quiera no le diga, hago lo que me pida, pero no le diga.

Y tomándola del brazo, la pongo de pie y la volteo de espaldas a mí llenándola de dudas.

La tomo de los hombros y le digo al oído, debes hacer mucho mérito conmigo sobrina – si sé – me responde. 

Yo- Quiero enseñarte - ¿a qué? – me pregunta. A coger por la colita.

M- pero tío usted no puede soy su…

Yo- no me importa – la interrumpí – se las ibas a dar a ese tipo, yo soy tu tío y si no quieres que le cuente todo a tu mamá pues… Coopera.

Resignada accedió a lo que le solicité y rápidamente le bajé el cierre del Jumper, retire su blusa y su sostén, no le quise quitar el Jumper por completo porque me ponía más caliente verla de colegiala, luego la incline sobre el brazo del sofá y lentamente fui bajando sus calzones hasta los tobillos luego separé sus nalgas, redonditas suaves y paraditas y me hundí en un beso negro como jamás lo había hecho, le pasaba la lengua en círculos por su ojete rosadito mientras con mis manos abría de par en par sus cachetes y ella iba respondiendo con gemidos bien audibles…

M- hay tío, mmmmghhh que ricoooo…haachh…mmmm

Luego de mamarle el culo por un muy buen rato, la puse a mamar verga para que me la lubricara, aunque ya estaba toda babosa de precum… Y uuuufff su boquita se sentía muy rica y no imaginan como me la paraba ver su carita de niña con su boquita mamando… Todo un poema.

Ya cuando la tenía bien dura, (que desde que inicie que me la puso bien firme) la volví a girar e inclinar contra el sofá y le pedí que se abriera las nalgas porque la iba a culear.

Ella hizo caso y le apoyé la cabeza del pene en su argolla, cabe señalar que solo la había estimulado con mi lengua, no le metí ni un dedo, porque quería sentir como mi verga abría ese culito virgen solo lubricándolo con mi precum.

Y así lo hice, fui golpeando poco a poco su orificio con mi punta sintiendo como se iba empapando de lubricante natural y poco a poco iba horadando ese hermoso culito que cada vez era menos virgen, pero que no estaba poniendo ninguna resistencia, es más, mi sobrina me alentaba a seguir con mis embates.

M- hay, así, así, sí, no, pare, dele, despacito, así, qué, rico… Dele, dele

Y así poco a poco me iba metiendo hasta que la cabeza entro y su argolla se cerró alrededor… Uuuuy qué rico sentir que entraba en su culito, así que seguí empujando esta vez con un poquito más de fuerza y volviendo en tramos más largos.

M- huuuu…haaaaach…. Que riiiicoooo tío, dele, siga, se siente rico no me la saque…

Ya cuando ví que ya la mitad le entraba bien, la agarré por la cintura y le di un empujón de verga que se la clavé hasta los huevos y empecé a darle lento y largo, pero firme. Iba y venía en su culo recién desvirgado mientras ella solo me animaba

M- dale, tío, dale, soy, tuya, dame, romperme, dame, augh, duro, duro… ¡Qué rico, así…!!!

Y yo aumenté el ritmo mientras veía como mi verga hacia el recorrido completo desde el interior hasta casi salir la cabeza de su culo para volver a entrar mientras estrellaba mis huevos contra su conchita con solo algunos pelitos.

El espectáculo era soberbio a mis ojos, tanto así que no aguantando más me dejé ir de leche en su culo con al menos cinco chorros de abundante, espesa y blanca leche que dejé en lo más profundo de sus entrañas y no me salí hasta que, ya blanda, salió solita dejando solo un goterón de semen en su asterisco y un hilito entre mi verga y su ano.

Martina quedó en la misma posición en que me la cogí, tomando aire, su cara muy roja, sus ojos vagando y una media sonrisa mordiendo su labio inferior.

M- hay tío…ufff… Qué rico me lo hizo.

¿Ya no le dirá nada a mi mamá, verdad?

Yo- por el momento no, pero recuerda… Tienes que hacer mucho mérito conmigo.

Por DaddyCool

No hay comentarios:

Publicar un comentario